La inhibición, como una sombra persistente, frena a muchos que desean adentrarse en el mundo del streaming. Sin embargo, el fenómeno de IShowSpeed desafía esta rigidez.
Raúl Mendoza
Mientras Donald Trump proclama la grandeza americana (MAGA), cabe recordar que el Perú tiene un origen histórico superior, una herencia que no necesita ser inventada, solo redescubierta. Mientras Estados Unidos ofrecía a sus toscos pioneros tierras áridas donde apenas asomar la vida, el Perú presentaba una historia magnífica.
La polémica por la obra María Maricón, retirada de la programación en la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP), trasciende lo artístico y se inscribe en una crisis de identidad de la universidad. La PUCP, consagrada en sus estatutos al Corazón de María y definida allí como seguidora de las enseñanzas cristianas, parece haberse distanciado de los principios que le dieron origen.
En una escena de Ricardo III, Shakespeare lo dibuja insatisfecho con la paz, aburrido, ansiando la guerra como quien, atrapado en la monotonía, busca emociones en el desastre. Esa inclinación hacia el caos y lo oscuro parece haber encontrado en nuestras redes y medios un escenario privilegiado.
La Edad Media simboliza un tiempo en el que las jerarquías rígidas y un destino inmutable definían la vida. La pobreza no era un estado transitorio, sino una condena heredada que ataba a generaciones. Las castas consolidaban las barreras impuestas por el nacimiento.
En el corazón de Montilla (España), Garcilaso de la Vega vivió una vida atravesada por el desarraigo, el mestizaje y el estigma de la bastardía. En aquella comunidad aún semifeudal, quien tenía título existía. Conde, duque, ¿cómo justificar su identidad sin título? Había pasado mucho tiempo desde su infancia andina.
Wisconsin. Un hombre decide salir de casa. Un acto irrelevante, un ligero salto entre el sonido de su puerta al cerrarse y el eco de sus pasos sobre la acera. Sin embargo, ese instante altera el destino de la humanidad.
El fracaso de la república es una tragedia que arrastramos desde 1821, un fracaso de castas que sustituyó virreyes por caudillos, espadas por partidos, opresores por oportunistas. La independencia solo fue, como en Larriva, cambio de yugo. Hoy, ese fracaso resuena en el Congreso, donde las oportunidades de asegurar la democracia se ahogan en las aguas turbias de la complicidad.
Castañeda siempre favorito en las encuestas presidenciales y nada. Qué decir de Lourdes Flores. Haya y Bedoya pintados por décadas. Casandra no acierta. Ni los pintados con justicia la tienen cantada. Al revés. En la historia han existido muchos fenómenos de última hora. Es posible ganar visibilidad rápido: depende del lema y los gestos.
En el universo del conocimiento humano, solemos confundir términos como inteligencia, erudición y sabiduría. Si bien están interrelacionadas, cada una ocupa un espacio distinto y posee una naturaleza única.
La PUCP celebró Aula Magna, evento que por 28 años reflexiona sobre el Perú. En su última jornada presentó a dos candidatos con visiones opuestas: Verónika Mendoza y Rafael Belaunde Llosa (con María Isabel Remy y Juan Carlos Tafur).
Ronald Coase y Ning Wang nos explican en su libro How China Became Capitalist, cómo China se volvió capitalista. La historia de su ascensión económica es un relato de transformaciones radicales.
“La política es principios y pragmatismo”, decía Luis Alberto Sánchez en “Examen de conciencia”. En el mayo francés, se adoptó la frase “soy realista, creo en lo imposible”. Acertarás con ambas. Créelo.
Escuchaba a Phillip Butters y al abogado Humberto Abanto diciendo, como Lucas Ghersi, que a Antauro Humala hay que ganarle en la cancha. Ojalá que cuando Hitler decidió competir en elecciones federales de 1932 (porque por el golpe no la vio) hubiera habido un Tribunal Constitucional que se lo hubiera impedido. La invalidez de los partidos antidemocráticos surgió después de él.
Douglas North nos iluminó con una verdad: las sociedades son gigantescos tableros de juego donde las reglas, las instituciones, determinan quiénes son los ganadores y quiénes los perdedores. Por tal, “las instituciones son el determinante del desempeño económico”. En el Perú, sin embargo, las reglas parecen más bien un borrador que se modifica a capricho de cualquiera.
Daron Acemoglu y James Robinson, en su libro “Por qué fracasan los países”, nos invitan a reflexionar sobre las razones que explican las diferencias económicas entre naciones similares. Según estos autores, la calidad de las instituciones, el estado de derecho y la existencia de modelos inclusivos son factores determinantes. Esta tesis no abarca la totalidad del fenómeno.
Corría enero de 2011, habíamos participado en una conferencia en Miraflores. El gran Eugenio D´Medina y yo. Autor de El mito de las cuerdas separadas, de un ensayo extraordinario sobre Sánchez Carrión y otros. Volvíamos; él, apretando el acelerador por la Vía Expresa. Quizás a 160 km por hora, menos, más; yo con el vértigo del copiloto.
Hay quienes asumen que Milei es una novedad, un liberal contra la casta estatista, pero hay quien lo precedió, y aunque suene extraño, es Mario Vargas Llosa. Al entrar en política motivado por la estatización de la banca, no solo fue un outsider reactivo, fue más: trajo al Perú las ideas de la libertad y fundó el primer partido realmente liberal en el Perú.