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Luis Miguel Cangalaya

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El teatro en el Perú durante la pandemia tuvo un espacio de pausa y de crisis. Muchas obras quedaron fuera y otras lucharon por sobrevivir en medio de las dificultades.

Cuando somos niños no tememos a la muerte. La idea de morir resulta lejana, incluso, a pesar de que en algún momento se pueda experimentar la muerte de algún familiar o de alguien conocido. Hay dolor, es cierto, pero es un dolor diferente, apaciguado. En este caso, si los recuerdos son pocos, el dolor es menor.

A Charles Bukowski lo conocí la primera vez que leí un libro enorme que reunía gran parte de su poesía. Entonces era alumno de tercer año de Literatura y ese hallazgo fotocopiado debió ser lo más sorprendente que encontré en esos primeros años universitarios. El hecho es que en esa fotocopia enorme no encontré alguna referencia a poetas peruanos.

El desorden es una oportunidad de reencontrarse con el pasado. De alguna forma, nos ordena en el tiempo, porque en esos espacios aparentemente olvidados guardamos los recuerdos. Así, encontré libros de la infancia, aquellos que alguna vez formaron parte del plan lector escolar, algunos comprados por obligación y otros que leí por convicción.

Un hombre llega una conocida librería. Ingresa, respira el olor de las páginas nuevas y se sumerge entre los estantes como si fuera la última vez que pudiera disfrutar de ello. Cuando elige un libro comprar, recuerda que no tiene cómo pagarlo. Un dilema recorre su cabeza.

Rodrigo Montoya (Puquio, 1943), sociólogo, antropólogo y escritor, es uno de los autores peruanos más prolíficos de los últimos años. Su trabajo académico es sumamente importante, ya que permite reflexionar a través de una mirada crítica. Asimismo, es frecuente su preocupación por los sucesos que ocurren alrededor, en la social y en lo político.

Establecí contacto con Jesús Raymundo el año pasado cuando presentó mi primer libro Investigar y escribir con APA 7. Hasta entonces solo lo conocía por redes sociales, como muchos, a través de su alter ego, el Doctor Tilde, cada vez que los medios destacaban las correcciones que realizaba a políticos, artistas o a cualquier personaje público. Desde entonces, hemos coincidido en algunos temas.

Hoy, después de dos años, vuelve de manera presencial la Feria Internacional del Libro de Lima en el parque Próceres de la Independencia de Jesús María. Esta feria se ha constituido como el evento cultural y editorial más importante de nuestro país.

La obra del escritor mexicano Salvador Elizondo, Farabeuf o la crónica de un instante (1965), permite darnos cuenta de que la narración trasciende los límites de la escritura. Se puede ver cómo las palabras se convierten en la vivencia que se describe y donde la lectura constituye la experiencia misma del argumento.

Aún recuerdo el primer regalo que recibí en el día del maestro. Fue una sonrisa que llegaba en los brazos de unos niños que apenas digerían la sintaxis del español y confundían las letras en los dictados de los viernes. Entonces aún era estudiante de Literatura, tenía dieciocho años y ese fue el primer y mejor regalo que recibí.

En el 2008 se reeditó Mitos, leyendas y cuentos peruanos, originalmente publicado en 1947, con la edición de José María Arguedas y Francisco Izquierdo Ríos. Se trata de un libro de narraciones breves de la costa, sierra y selva. En cada historia da a entender lo que sucede en un modo fantástico y a la vez natural.

Una de las novelas más celebradas del escritor chileno Roberto Bolaño es 2666 (Anagrama, 2004), una voluminosa obra que se publicó de forma póstuma y cuenta con cinco partes que se extienden a lo largo de más de 1000 páginas. La sección llamada “La parte de los crímenes” es quizá la más intrigante por el eje conductor que también compromete a las demás: la violencia.

Hay una idea de Nietzsche que puede aplicarse a la actualidad. Para él, el mundo puede dividirse en dos tipos de personas: las que siguen sus propios deseos y las que siguen el deseo de los demás. Las primeras son las que se asumen como fuertes y, por eso, no se dejan gobernar por nadie. Las segundas son aquellas que se muestran débiles y se limitan a hacer lo que los demás dicen y hacen.

Paco Moreno publicó a fines del año pasado El jinete en la hora cero (Artífice Comunicadores, 2021). Se trata de una novela histórica cuya historia está ambientada en la violencia del terrorismo en Ayacucho de los años 80 y la pandemia por la covid-19. Narra una serie de evocaciones, con nostalgia, así como los temores de un hijo de campesinos ayacuchanos.

En semanas previas al Día del Padre, casi no teníamos motivos para festejar. No había preparativos ni nada que nos preocupara más allá que esperar el tercer domingo de junio para visitar a papá. Siempre lo encontrábamos en su sillón y con la televisión encendida. Destapaba una cerveza y bebía solo mientras la música se perdía con las noticias. Renegaba.

Ramón Avilés Isusqui, hijo del recordado músico Óscar Avilés, es conocido como “El Bolerista de América”, aunque sus primeros pasos artísticos fueron con la música criolla. A los 19 años debutó en el ambiente discográfico. Grabó su primer disco en 1967 y en 1968 grabó su éxito “Dónde estás, Yolanda”, un clásico del bolero peruano.

En el marco de la conmemoración del Bicentenario de la Independencia, el Fondo Editorial del Congreso del Perú viene publicando una serie de libros que abordan dicha temática desde diferentes ópticas.

Sara, esposa de Abraham, es un personaje bíblico que aparece como una de las mujeres más hermosas de toda su generación. En verdad, no solo era la esposa, sino, además, medio hermana de Abraham, en una época donde este tipo de casos era frecuente dentro de las familias y comunidades.

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