Miguel Ángel Rodríguez Mackay

Hoy, sábado 29 de junio, que la Iglesia celebra el Día del Papa, recordemos cómo fue elegido sumo pontífice, el cardenal argentino Mario Bergoglio. El cónclave de 2013 –reunión de cardenales y será bueno recordar que el Perú cuenta dos: Juan Luis Cipriani y Pedro Barreto–, lo eligió Papa tras la quinta votación del 13 de marzo de ese año.

No podía dejar pasar una fecha tan importante en la historia europea, pero sobre todo para el Reino Unido, como el nacimiento el 28 de junio de 1491 de la voluminosa figura –no es una mera denotación física, por supuesto– del rey Enrique VIII, mentadísimo monarca europeo que ningún sílabo de Historia Universal podría obviar en el rigor de nuestra mejor formación académico-humanista.

Las movilizaciones militares de ayer en La Paz, Bolivia, contra el gobierno del presidente Luis Arce, buscando derrocarlo, sea porque se nieguen a que Evo Morales se constituya en candidato para las próximas elecciones presidenciales, el pleito de este con el presidente Arce que se ha exacerbado notoriamente, la financiación exógena o de sectores de la ultraderecha boliviana para acabar con la

No hay dos vidas. La única que tenemos debe ser conservada in extremis y para ello está el derecho como mecanismo convencional establecido por toda la humanidad para regular su protección.

Ayer, lunes 24 de junio, se ha celebrado en nuestro país, el Día del Campesino, que el presidente Augusto B. Leguía –gobernó entre 1908-1912 y 1919-1930– llamó Día del Indio. En torno de esta fecha diré lo siguiente: los criollos y los mestizos, que sintieron el desprecio del peninsular durante el virreinato, cargaron contra el indígena la misma indiferencia que los conquistadores hacia ellos.

En un acto que avergüenza a la diplomacia peruana, el actual ministro de Relaciones Exteriores, Javier González-Olaechea, ha cometido el mayor desatino y desaire diplomáticos que se pueda uno imaginar: asistir al acto oficial más esperado en la historia de la relación bilateral de nuestro país y Canadá, desarrollado en la residencia del excelentísimo señor embajador de ese país acreditado ante

Ahora que le hemos puesto la puntería a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, a las Organizaciones No Gubernamentales, etc., que hacen lo que les da la gana con nuestro país porque NADIE las pone en su lugar como corresponde, quisiera referirme a la supranacionalidad, de la que mucho se dice y poco se conoce en su exacta naturaleza desde

El encuentro entre el líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, y el presidente de Rusia, Vladmir Putin, en la ciudad de Pyongyang, la capital norcoreana, por supuesto que lleno de pompa como se esperaba, más allá de las afinidades ideológicas que todos sabemos, en realidad ha confirmado que se necesitan mutuamente, pues se trata de dos países que han sido sancionados económicamente por occidente

El territorio más septentrional de América –Alaska– con un área de 1,518,800 km2, que fue comprado por los Estados Unidos de América a Rusia, el 30 de marzo de 1867 –gobernaba el Perú Mariano Ignacio Prado–, pasó al poder efectivo de la administración de Washington el 20 de junio de 1867, como hoy, hace 157 años.

Una vez que fue detectado que los paneles solares, colocados por Argentina, se había hecho –fortuitamente–, invadiendo tres metros dentro del territorio chileno, el presidente mapuche, Gabriel Boric, saltó hasta el techo para exigir que sean retirados, inmediatamente.

La reciente Cumbre de Paz en Suiza –desarrollada en el complejo de Bürgenstock, cerca de Lucerna, los días 15 y 16 de junio–, en que se reunieron teóricamente países que respaldan a Ucrania, con Estados Unidos a la cabeza, aunque con buenas intenciones para acabar la guerra entre Rusia y Kiev, que cumplirá 28 meses de duración el próximo 24 de junio, ha sido solamente un esfuerzo para conseguir

Las complejidades migratorias que vemos en diversas partes del mundo como es el caso de los latinos que buscan cruzar la frontera mexicano-estadounidense o de los africanos subsaharianos que quieren llegar hasta las costas europeas cruzando el peligroso Mar Mediterráneo, por ejemplo, vuelve a poner en debate la crucial circunstancia migratoria que el derecho internacional no puede soslayar.

Antauro Humala, hermano del expresidente Ollanta, acaba de llamar a consumar un golpe de Estado contra el gobierno constitucional de la presidenta Dina Boluarte.

Ahora que veo que se realizan juicios jurídicos al por mayor sin tener en cuenta la ciencia del derecho, quisiera referirme a la enorme figura del jurista Hans Kelsen, a mi juicio, el más importante del siglo XX con un legado extraordinario para la juridicidad planetaria, cualquiera sea el sistema jurídico que se imponga en diversas partes del globo.

Para decirlo con objetividad y no porque sea una política de izquierda pues no tengo ningún prejuicio con la izquierda latinoamericana ni la de mi país –advierto que no soy un hombre de derecha y tampoco le tengo animadversión, solo los que no leen se polarizan conceptualmente a cada rato dominados por el rechazo a la ideología que desde la ciencia política no es mala sino, en cambio, su ejerci

El emblemático activista Nelson Mandela, que fuera el primer negro que se convirtió en presidente de la República de Sudáfrica –el país más austral del continente africano, casi con 60 millones de habitantes–, el 12 de junio de 1964 como hoy –han transcurrido 60 años–, fue condenado por una corte blanca a la pena de cadena perpetua por el delito de sabotaje.

Un día como hoy, 11 de junio, pero de 1982, en el marco de la guerra de Las Malvinas, Su Santidad, el papa Juan Pablo II –luego elevado a los altares por su canonización–, visitó Argentina. Su fuerza pontificia y como pastor universal fue clave para la búsqueda de la terminación del conflicto que mantenía Argentina con el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte.

No me equivoqué con el título de mi columna en Expreso del domingo 4 de junio de 2023, que denominé “LA DESGRACIA DE NO SER NACIONALISTAS”, pues ha sido una completa falta de respeto al PERÚ y a la BANDERA NACIONAL que hayan brillado por su ausencia las más altas autoridades del Estado en la ceremonia central del pasado viernes 7 de junio, en la Plaza Bolognesi del centro de Lima.