Uso de la tecnología para una respuesta firme a la inseguridad ciudadana
El derecho a la protesta pacífica se respeta y se garantiza, pero no se deben tolerar que minorías violentas usen este derecho como un medio para sembrar el caos. La violencia, el vandalismo y el ataque a nuestras fuerzas del orden no son protesta, son delitos y como tal, deben ser tratados con toda la fuerza de la ley y para ello se debe usar la tecnología de vigilancia, para que cada rostro que participó en actos violentos pueda ser identificado, sea por cámaras o drones y las imágenes deben ser entregadas a la Policía Nacional del Perú.
En el caso de los daños causados a la infraestructura de la Municipalidad de Lima, la Procuraduría Pública Municipal, en coordinación con el Ministerio Público, deben iniciar las acciones legales para que los responsables asuman las consecuencias penales y civiles de sus actos. Las cámaras de videovigilancia del Cercado y los drones de vigilancia aérea registraron cada movimiento, generando evidencia crucial para la identificación de los vándalos y la reconstrucción de los hechos.
La defensa del orden y la tranquilidad de todos los vecinos debe ser con firmeza, tecnología y estrategia, consolidando el principio de autoridad y avanzando hacia una Lima donde todos puedan vivir y trabajar en paz.
Para el uso eficiente de la tecnología en seguridad ciudadana, la Municipalidad de Lima viene trabajando en la implementación del C5 que será el cerebro tecnológico que integrará a la PNP, Serenazgo, Ministerio Publico, Poder Judicial, Bomberos, Defensa Civil y además las más de 4,400 cámaras de los 43 distritos de Lima en un solo sistema inteligente con IA para la prevención del delito y la gestión de emergencias a gran escala, siendo de obligatorio cumplimiento, en el marco del Plan Regional de Seguridad Ciudadana, y vinculante para todos los distritos de Lima . Éste será entregado en el mes de junio de 2026
Siendo la prioridad proteger a los miles de vecinos y comerciantes durante la campaña navideña, se debe reforzar la seguridad en los conglomerados comerciales más importantes de Lima con un escudo tecnológico y operativo y que al llegar al aforo máximo, se emita una alerta pública en los paneles de toda la ciudad, impidiendo nuevos accesos para prevenir tragedias. La seguridad debe ser planificada y no improvisada.
Es importante la participación y cooperación de la empresa privada, que permita la implementación de modernos centros de control debidamente equipados con tecnología de última generación en dichos conglomerados comerciales, para un monitoreo permanente y en tiempo real reforzando la capacidad de respuesta frente a situaciones de riesgo, delitos y emergencias. Esta iniciativa no solo representaría un salto cualitativo en la seguridad ciudadana, sino que también constituiría un ejemplo de cómo la colaboración público-privada puede generar impactos inmediatos en beneficio de la ciudadanía.
El aprovechamiento de los medios tecnológicos en la seguridad ciudadana beneficiará en forma inmediata a los vecinos que se encuentran aterrorizados por los hechos delincuenciales que viene azotando a nuestras ciudades, recuperando la confianza en sus autoridades.
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