Radicales sueltos
Alguna vez escuchamos que no hay radical bueno salvo los radicales libres del mundo de la química. Quizá sea exagerado pero la verdad rara vez los extremismos son buenos consejeros. Y de eso ya tenemos demasiado en el país.
Oír a una congresista sostener que el texto escolar es más importante que el propio profesor o que basta el libro para educar es un dislate de lesa cultura. Promover la iniciativa “Hombres por la Igualdad” –o el enfoque de género– recurriendo a un delantal rosado sobre el uniforme oficial de los miembros del Estado Mayor del Ejército pudo haber sido bien intencionada sin necesidad de llegar a este exceso de dudoso gusto, aunque igual la campaña de sensibilización contra la discriminación y la violencia machista resulta indispensable con mayor consenso. La alharaca armada contra la homologación judicial del Acuerdo de Colaboración con Odebrecht pretextando que la corrupta corporación se acogió en Brasil al sistema concursal confundiendo deliberada o ignorantemente la reestructuración empresarial con la quiebra y omitiendo que la concursada es la matriz y no las subsidiarias procesadas en el Perú, huele no solo a extremismo sino a intereses subalternos. El cargamontón contra Sergio Moro, el otrora súper juez que lideró “Lava Jato” y ahora tildado de ídolo de barro debido al chuponeo de sus comunicaciones que revelan una conducta inapropiada, está llegando al punto de buscar enlodar la legalidad y legitimidad de la más importante cruzada anticorrupción en el Brasil y cuyos efectos van permitiendo sanear la lacra que también pudrió nuestro país. Y podemos seguir.
Lograr alcanzar el justo medio, ese valor ideal de la filosofía y la ética aristotélica, es algo que parece cada vez más lejano en la sociedad peruana tan polarizada e intolerante que poco ha cambiado en los últimos 200 años. Tiene sentido, por ello, una reflexiva propuesta iniciada en los medios que invita a “Escucharnos” a ver si nos entendemos. Ojalá sirva de inspiración para ser más ciudadanos y menos adversarios sectarios. Si no Dios nos ayude el 2021. ¡AMÉN!
