ÚLTIMA HORA
PUBLICIDAD

Por los caminos del Señor

Imagen
Fecha Publicación: 12/10/2024 - 21:30
Escucha esta nota

Hola… Escribo esta crónica desde una ciudad italiana llamada Nápoles. Al llegar al aeropuerto, lo he visto muy similar al de Arequipa, Chiclayo o Trujillo, aunque con un detalle peculiar: los autobuses de recogida están ubicados a no menos de cuatro cuadras de la salida del aeropuerto. Te menciono esto como un dato curioso, pero me gustaría contarte una anécdota que sucedió después de aterrizar.
Sentado junto a la ventanilla, el avión descendía, iba por la pista y se detuvo en un lugar donde descendimos para llegar al terminal de ómnibus. Aunque te parezca increíble, observé con detenimiento si en algún lugar del aeropuerto, concretamente en la pista, se encontraba el Ferrari negro de Maradona, que en paz descanse. Ustedes se preguntarán a qué viene esta referencia, pero resulta que hace años Maradona fue contratado por el club de esta ciudad, el Napoli, procedente del Barcelona, club de fútbol de España. Creo que hizo ganar por primera vez el Scudetto y otros importantes títulos, por lo que Maradona se constituyó en el Rey de Nápoles. Reinado que dura hasta ahora, ya que al estadio le pusieron el nombre Diego Armando Maradona.
En una oportunidad, después de ganar el Mundial de Fútbol con Argentina, llegó desde Buenos Aires en su avión particular. Para esto, Coppola, su representante, le indicó que el presidente del Napoli le iba a dar el regalo que él escogiese. Maradona le dijo: “Quiero un Ferrari de color negro”. Coppola quedó extrañadísimo, porque el color original es rojo y Ferrari nunca había fabricado un carro de color negro. Pero lo pedía Maradona, y lo pedía el presidente del Napoli. El creador del Ferrari, que aún vivía, dijo: “Eso es imposible”, pero... el dinero lo convenció y mandó a construir para Maradona el Ferrari de color negro.
Regresando al día en que Maradona llegó a Nápoles, bajó de su avión y, en las escalinatas, se encontró con el Ferrari negro. Emocionadísimo, se subió al lujoso carro y, por la pista del aeropuerto, se dirigió hacia la carretera. No había avanzado ni dos cuadras cuando, de repente, frenó en seco: “No quiero este auto”, le dijo a Coppola. Desconcertado, su representante le preguntó por qué, si era exactamente lo que había pedido. Maradona, bajando del coche, respondió sin dudar: “No tiene radio estéreo”.
Me acordé de esta anécdota llegando al aeropuerto de Nápoles y pensaba cómo, muchas veces, nos dejamos llevar por caprichos y perdemos de vista, en nuestra vida, maravillosas oportunidades que Dios nos da.
“El Señor de los Milagros es nuestro CONSUELO”
Gracias por llegar hasta aquí. Hasta la próxima semana. ¡Que Dios nos bendiga!
Contáctanos en el canal de YouTube: @PadrePablo

Mira más contenidos siguiéndonos en FacebookXInstagram, TikTok y únete a nuestro grupo de Telegram para recibir las noticias del momento.