Por los caminos del Señor

Hola… No podría ser de otra manera, iniciaremos este domingo doce con una oración especial a Nuestra Madre, la Virgen, en una de las advocaciones más queridas en nuestra América. Un día como hoy, según una tradición oral mexicana, la Virgen María se le apareció al indígena chichimeca, Juan Diego, en el cerro del Tepeyac.

Cuenta la historia que San Juan Diego tenía un tío, Juan Bernardino, quien estaba gravísimo y decidió ir a México para buscar un sacerdote que le diera la unción de enfermos; en el camino, cruzando el cerro del Tepeyac, se le aparece la Virgen, quien le indica que Ella es María, la Madre de Jesús, y le dice: -No te preocupes por tu tío Juan, yo me ocuparé de él, más bien preséntate ante el obispo, Don Juan de Zumárraga, primer obispo de México, y le dices que la Virgen quiere que le construyan un templo. San Juan Diego se dirige donde el señor obispo y le manifiesta todo lo que la Virgen le pidió. El obispo no le creyó, pero este humilde indiecito, ante la respuesta negativa, continuó insistiendo y el obispo no tuvo otra que pedirle lo siguiente: -Ve al Tepeyac y dile a la Virgen que te regale unas flores; dicho sea de paso, el obispo era del País Vasco de España y sabía que esas flores solamente se daban en el norte de España. Juan Diego, ni corto ni perezoso, corrió al Tepeyac donde se encontró nuevamente con la Virgen y le mencionó lo que el obispo le pidió. Ella le dijo: -Juan Diego, detrás de esos matorrales hay unas flores, que son aquellas que el obispo te ha pedido, llévaselas. Este las recoge del suelo, las pone en su tilma y se las llevó. -Aquí están, señor obispo y, abriendo la tilma, estas se habían convertido en una imagen tal y cual San Juan Diego vio a la Virgen en el Tepeyac. Sucedió el milagro, inmediatamente el señor obispo mandó a construir un templo en honor a la Virgen María, poniéndole por nombre “Nuestra Señora de Guadalupe”.

Hoy es el día y este es el momento para elevar una oración al cielo, que ha de pasar necesariamente por esta bella advocación mariana, que no es solo para México, sino para el mundo entero, el podernos sentir colmados de gracias y bendiciones de nuestra Madre y Señora, la Virgen de Guadalupe.

Otro día te comentaré algunos hechos maravillosos de esa imagen de la Virgen, pero hoy detengámonos en lo principal, que es nuestra oración hacia Ella.

La Virgen de Guadalupe es Patrona de México, América, Filipinas y es venerada por la Iglesia Católica, Iglesia Ortodoxa, Comunión Anglicana, Iglesia Copta e Iglesia Católica Maronita.

“En Navidad todos los caminos conducen a la familia”.

Gracias por llegar hasta aquí. Hasta la próxima semana. ¡Que Dios nos bendiga!

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