Mala praxis
La responsabilidad médico-veterinaria últimamente ha incrementado las denuncias hacia las veterinarias exigiendo sus derechos con fundamento y en toda la razón, pero otras han caído en difamaciones o calumnias llevando muchas veces a contrademandas o actos de disculpas públicas.
¿Cuándo sabemos que hay realmente responsabilidad del médico veterinario en la salud de nuestros peludos?, le consultamos al Dr. Jhon Islachin, médico veterinario forense, los tipos o causales que nos pueden llevar a ejecutar una denuncia por mala praxis.
Jhon nos comenta: Son 4 tipos de responsabilidad que todo personal de la salud que brinda un servicio (público o privado) está sometido a cuestionamiento: la negligencia, la impericia, la imprudencia y la inobservancia. La negligencia implica la inactividad o actividad que produce un daño producto de “no hacer” lo debido o hacer lo indebido. La impericia es cuando no se tuvo el conocimiento técnico que se necesitaba para el servicio. La imprudencia es tomar un riesgo innecesario pudiendo evitarse y la inobservancia es la omisión impropia de la norma o reglamento. Un ejemplo es cuando tu mascota tiene una enfermedad infecciosa, lo llevas al veterinario y fallece. ¿Se cometió delito o alguna falta?, pues va a depender si se le dio el manejo y medicación adecuada o si se realizaron los exámenes correctos para determinar la infección y si la muerte fue o no producto de la infección. Claro está que para saber todo esto es necesario tener conocimiento profundo de la medicina veterinaria y realizar un estudio del caso, que va desde la revisión de los informes médicos e historial clínico hasta necropsias y pruebas forenses.
MEDIOS PROBATORIOS PARA DENUNCIA SOBRE MALA PRAXIS
Primero pedir y guardar las boletas como medio probatorio de atención y costos. Luego solicitar el historial clínico de la mascota, si es necesario un informe detallado de la atención médica de su mascota, puede consultar una segunda opinión con otro veterinario de su confianza sobre el tratamiento o pronóstico de su mascota. Se aconseja no pedir opiniones o conclusiones por internet o redes sociales sobre el caso, pues generalmente son muy confusas, poco técnicas o hasta maliciosas y luego podrían jugar en contra, por eso es bueno pedir asesoría legal con un abogado experto en Derecho Animal. Asimismo, saber el nombre y número de colegiatura del veterinario que ha tratado a la mascota, verificarlo en la página web del CMVL (Colegio Médico Veterinario de Lima). De no estar habilitado puede dar aviso al CMVL para el proceso administrativo y de no estar colegiado puede recurrir a la fiscalía o PNP para el inicio de un proceso penal por ejercicio ilegal de la profesión. Algunas personas acuden a Indecopi si consideran un servicio deficiente o se sienten estafados como consumidores, en todo caso te pedirán los pruebas o medios ya descritos.
¿A dónde podemos acudir? En Lima existe una veterinaria (Animal Flow) que apoya con sus instalaciones al Centro de Medicina Veterinaria Legal y forense del Perú EIRL, ubicado en San Juan de Miraflores, Pamplona alta, paradero 20 y a la PNP o Fiscalía si son actos de muerte muy evidentes con las pruebas ya mencionadas. Cabe señalar que cada caso es único y siempre se tiene que hacer una evaluación profunda para ver el grado de responsabilidad.
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