La fiscal más la CAN
Aunque los dos temas no tienen relación son de la mayor importancia en estos días.
En cuanto a la malamente suspendida Fiscal de la Nación Patricia Benavides, queda pendiente la sentencia del TC sobre la demanda competencial entablada a su iniciativa contra la cuestionable Junta Nacional de Justicia (JNJ); el irregular procedimiento disciplinario que le ha abierto ésta última así como la investigación preliminar por ocho imputaciones penales que acaba de iniciarle el Despacho de la Fiscalía de la Nación por el momento en otras manos. Es decir, un cargamontón en toda regla. En qué termine este bolondrón que mancha al Ministerio Público (MP) como no se había visto desde los tiempos del fujimontesinismo, resulta aún de pronóstico reservado. Sin embargo, todavía continuamos dándole a la Dra. Benavides el beneficio de la duda dado que los “principales” medios de prueba en su contra se basan en dudosos chats y pantallazos editados de whatsapp hasta ahora no corroborados pericialmente y en las declaraciones de un aspirante a colaborador eficaz que por su pasado y por salvarse de chirona manifestaría que el día es la noche. Empero, no ocultamos la decepción por la falta de transparencia en que ha caído la Fiscal de marras al no aclarar debidamente el affaire de su tesis de postgrado o los cambios fiscales que dispuso en el proceso penal que se ventila contra su hermana, que poco la han ayudado ante la opinión pública. Lo cierto es que sea como termine este patético capítulo que arrastra y lo arrastra al MP, este organismo esencial para el sistema de justicia tendrá que ser purgado desde arriba para abajo. Y a otra cosa.
La verdad, casi nos habíamos olvidado de la existencia institucional de la CAN, la Comunidad Andina de Naciones que se remonta con otro nombre a 1969 y que, prácticamente, parecía que vegetaba compuesta por menos Estados que al inicio –se fueron Chile y Venezuela– y que hacía más noticia por la millonada que cobran los cuasi desconocidos Parlamentarios Andinos –igual que cualquier Padre o Madre de la Patria– que por sus obras en favor de la real integración subregional. Pues bien, la trágica situación interna que atraviesa el Ecuador y que podría amenazar a sus pares regionales Perú, Colombia y Bolivia, ha provocado que la CAN se sacuda positivamente. En efecto, al pergeñar estas líneas la XXIV Reunión Extraordinaria del Consejo Andino de Ministros de RREE en unión de los Ministros y Viceministros a cargo de la seguridad y defensa de sus respectivos países, han aprobado en Lima y por consenso una Decisión vinculante que por su fundamental contenido confiamos contribuirá eficaz, coordinada y solidariamente en la lucha-por no decir guerra- contra la criminalidad organizada y el narcotráfico transfronterizo que golpea gravemente a las Repúblicas andinas. Ante esta Decisión, nuestro esperanzado reconocimiento a la Cancillería peruana y, en especial, a la Secretaría General de la CAN a cargo de nuestro compatriota el Embajador Gonzalo Gutiérrez por su exitoso trabajo. ¡AMÉN!
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