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El discurso de Tokarczuk

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Fecha Publicación: 10/09/2020 - 19:50
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Olga Nawoja Tokarczuk es una escritora polaca que ganó el premio Nobel 2018. En su discurso revela cómo la literatura puede hacer mucho más que solo contar historias. Además, afirma que “la literatura es una de las pocas esferas que intentan mantenernos cerca de los hechos concretos del mundo”. Y es cierto. Más allá de los aspectos ficcionales, la literatura termina formando parte de la vida misma, de nosotros mismos y de los hechos que nos rodean.

Situaciones como las que vivimos ahora nos permite –o nos debería permitir– ser más humanos. Sin embargo, si miramos alrededor, las cosas son diferentes. Muchas veces hasta agotamos las esperanzas de confiar en la humanidad, si se trata de ver hechos concretos, por ejemplo. Tokarczuk señala que “el mundo se está muriendo y no lo notamos. No vemos que el mundo se está convirtiendo en una colección de cosas e incidentes, una extensión sin vida en la que nos movemos perdidos y solitarios”. Esto, tomando en cuenta que el discurso fue pronunciado en diciembre de 2019, cuando aún no se había propagado la pandemia y entendiendo, además, que no se refiere a la realidad actual, pero que bien se adecúa a estos tiempos.

La literatura aparece, entonces, como una forma de sentirse uno mismo y sentir a los otros, a aquellos que en un mundo como este, muchas veces ignoramos. Ahí cobra importancia la ternura, pues termina siendo la forma más modesta de amor: “La ternura es espontánea y desinteresada; va mucho más allá del sentimiento de empatía”, sentencia. Quizá por eso nos hayamos dado cuenta que en estos tiempos difíciles no solo la literatura es útil, sino las artes en general, todo aquello que en el mundo material termina siendo postergado. En épocas como esta, el arte es uno de los pocos caminos que permiten acercarnos a los demás. Por eso, no dejemos de escribir jamás.