ÚLTIMA HORA
PUBLICIDAD

Crece la expectativa

Imagen
Fecha Publicación: 12/07/2024 - 21:00
Escucha esta nota

La demanda competencial planteada por el Congreso de la República contra el Poder Judicial quedó al voto en el Tribunal Constitucional. Los alegatos de los abogados de una y otra parte fueron escuchados en directo por el país que ahora aguarda con expectativa la decisión final de los integrantes del TC, garante supremo de la constitucionalidad.

Lo que la población espera del TC es una posición clara, firme y definitiva, que no permita dudas a futuro sobre las competencias de las instituciones en controversia. Caso contrario nos habremos hundido en las profundidades de la ambigüedad donde los claroscuros sean los colores que conduzcan a la verdad que siempre será esquiva y antojadiza.

Resulta insólito que tengamos que llegar a esta situación, porque dos poderes del Estado se reclaman competentes en una decisión que la Constitución Política le reserva para uno de ellos, hecho que deberá ser analizado y zanjado, ojalá lo más pronto posible, por la más reconocida institución en pronunciarse sobre la legitimidad y legalidad en la aplicación constitucional como es el Tribunal Constitucional.

El constitucionalista Aníbal Quiroga, quien acudió al TC en representación del congreso de la República, recordó que ya el año pasado el TC resolvió un proceso competencial a favor de su representada, señalando cuáles eran sus funciones por mandato constitucional. “La sentencia del TC vincula a los poderes públicos”.

Por su parte, el procurador público adjunto del PJ, Jhony Tupayachi Sotomayor, solicitó considerar la improcedencia de la demanda planteada por el legislativo, justificando la resolución judicial, materia de la contienda competencial. Tupayachi argumentó que los doctores Tello y Vásquez consideraron que la medida impuesta por el Congreso había afectado sus derechos fundamentales.

Sostuvo que el Congreso de la República no solo está cuestionando un proceso que aún se encuentra pendiente de resolución, sino que está atentando contra la labor de los jueces. “La competencia del juez no puede concebirse como una irrupción de atribuciones a otros órganos del Estado, sino como un mero ejercicio de competencia”, argumentó. Cualquiera fuese el fallo del TC, queda a las instituciones acatarlo.

Por otra parte, esta semana, la televisión nos mostró en directo lo que puede ocurrir con la barbarie, si las autoridades no ponen freno a los exaltados que usan la violencia como arma de protesta.

En una actitud censurable varios de estos persiguieron en la vía pública a la doctora, Giulliana Loza, abogada de Keiko Fujimori. La prensa escrita informó este hecho de la manera siguiente: “La agresión comenzó en la avenida Manuel Cuadros y se extendió hasta la intersección con la avenida Paseo de la República.

Loza describió que los atacantes le lanzaron palos, botellas, la empujaron y le propinaron patadas. “Una persona vestida con un saco rojo me golpeó en la cabeza con lo que parecía ser un palo”, declaró Loza. Además, los agresores la amenazaron con frases como “muere, abogada de corrupto, mala, fuera, te vamos a destruir”. Quienes la golpearon arengaban a favor del fiscal José Domingo Pérez y contra Keiko Fujimori.

El informe médico legista –dice la prensa– confirmó que Loza presentó contusiones en ambos hombros y en el hemicráneo izquierdo, además de equimosis rojiza en la región trapezoidal posterior izquierda y en la pierna derecha, lesiones causadas por un agente contundente. Los médicos concluyeron que las heridas eran traumáticas y recientes, y le otorgaron cuatro días de incapacidad médico-legal. La víctima solicitó después garantías para su seguridad.

La violencia, sea verbal o física, no la debemos tolerar. No la podemos aceptar para nadie. La violencia de por sí es censurable y puede resultar peligrosa para una sana convivencia. No olvidemos que vivimos en un Estado de derecho; es decir, en una democracia. Las personas nos debemos respeto y tolerancia los unos con los otros. No hay razón para atizar la hoguera del odio o los resentimientos que sólo traslucen nuestras más bajas pasiones.

Dentro de este trajín, nos enteramos de la fatal noticia del fallecimiento de Javier Valle-Riestra, un político que supo dar vida a la democracia aportando todo de si en defensa de los derechos fundamentales; descansa en paz apreciado “presidente”.

Mira más contenidos siguiéndonos en FacebookXInstagramTikTok y únete a nuestro grupo de Telegram para recibir las noticias del momento.