Boluarte y su desgobierno brutal
El Ejecutivo tiene oídos sordos además de estar perdido, no sabe qué hacer con el país. Boluarte está preocupada por su sobrevivencia, solo se dedica a asegurar un plan B para no terminar en la cárcel y no creo que se vaya con los bolsillos vacíos. Su escandaloso aumento de sueldo a más del doble, posiblemente no sea su única fuente de ingresos. Tampoco parece que tenga asegurada alguna embajada amiga al mejor estilo de Nadine o Lilia Paredes. Difícil que México la reciba si es percibida como la traidora de Castillo; AMLO la calificó como “usurpadora” y “espuria”. Dudo que algún gobierno se la juegue por ella.
Es una ventajista de poca monta. Pretendió guardar su puesto en RENIEC por 5 años, con el agravante de que en el 2020 interpuso una demanda para que se le reconozcan innumerables derechos laborales, juicio que obviamente ganó ya siendo presidenta, reconociéndosele una jugosa suma de S/ 240,000 soles, 54 veces su sueldo mensual que ascendía a S/4,500. Seguramente pocos lo recuerdan porque los peruanos carecemos de memoria y somos demasiado perdonavidas. En nombre de la democracia se ha permitido que esta señora se mantenga en la presidencia. Sabemos que la vacancia se ha vuelto un recurso político recurrente, pero Boluarte se lo merece tanto como Vizcarra.
Confío en que el almirante José Cueto sea designado presidente del Congreso y que se vaque a Boluarte, a la mayor brevedad. Algún orden podrá imponer un ex jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas en este territorio llamado Perú, donde manda la minería ilegal.
Paralizan el país porque exigen que se permita la prórroga de formalización de los 50,000 mineros informales y la flexibilización de los requisitos. Vale decir, quieren un fast track pagado para incorporarse a la minería formal, recibir todas las autorizaciones de ley para luego incumplirlas. ¿Someterse a la onerosa sobrerregulación minera? Pareciera una broma. La mesa de diálogo no va a solucionar nada, está probado de que no sirven, salvo para que ganen tiempo los infractores, postergándose las acciones de fiscalización y control. Es una salida fácil para el incompetente gobierno y un triunfo para la ilegalidad.
Todos conocemos los números y los destrozos, los discursos de Boluarte en la televisión nacional no sirven para nada, tanto como los comunicados de los gremios, simbólicos, un saludo a la bandera. Lo que se necesita es mucha INTELIGENCIA para capturar a los líderes, a los que mueven los millones y meterlos presos. Si en el Perú no podemos, contratemos ayuda extranjera, especialistas privados, pero tomemos acciones efectivas ya, los diálogos no llevan a ninguna parte.
EL tema de moda es que las empresas tienen propósito, vale decir, que también existen para cumplir una misión social. ¿Realmente se valora que las empresas tengan un rol ético y constructivo, o solo es parte de un discurso florero para venderse mejor? En mi opinión, las empresas solo tienen fines de lucro, maximizar ganancias para sus accionistas y no le creeré a quien sostenga lo contrario. En todo caso, lo he podido comprobar recientemente. En noviembre se realiza el encuentro empresarial más importante del país y no tienen ni han pensado en destinar un solo metro cuadrado del espacio que alquilan, para que asociaciones sin fines de lucro, constituidas con el único propósito de ayudar a los niños vulnerables del país, puedan difundir sus objetivos y comprometer a los empresarios “con propósito”, con su causa.
Absolutamente decepcionante pero no me sorprende porque en el Perú la filantropía es inexistente o muy limitada, a diferencia, por ejemplo, del Reino Unido donde es una cultura profundamente arraigada en la sociedad. Impresionante el nivel de compromiso y solidaridad. Estamos a años luz, la poquísima cooperación suele ser ocasional, reactiva y muchas veces motivada por emergencias o presión social. Una verdad lamentable sin visos de solución.
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