Villarán, la exalcaldesa corrupta

Prueba de que la justicia sigue en manos de Gorriti y su guarida de caviares es que, no obstante, el fiscal Walter Villanueva formulara investigación preliminar contra Susana Villarán y sus compinches caviares —imputándoles haber receptado once millones de dólares en coimas provenientes de contratistas brasileñas, como OAS y Odebrecht; tal cual la propia exalcaldesa Susana Villarán declaró el 14 de mayo de 2019 (hace seis años)—, continúa sin esclarecerse la responsabilidad que tuvo Villarán durante su infame gestión municipal.
Recordemos que dicha exalcaldesa, idolatrada por las izquierdas, concertó con algunas contratistas para favorecerse a cambio de firmar un nuevo contrato para extender la concesión del anillo vial Línea Amarilla; y, aparte, facilitarles el reajuste de tarifas de los peajes todas las veces que quisieran las citadas empresas corruptoras. Según la declaración pública que hizo Villarán, esos US$11’000,000 sirvieron para financiar la campaña para su reelección en 2014. Pero la realidad es que Villarán —utilizando uno, máximo dos millones para ese fin— repartió el resto entre ella —la parte del león— y sus compinches.
En otras palabras, Villarán es la única culpable de que millones de peruanos sufran cada día pagando peajes a costos verdaderamente estrafalarios y criminales, que afectan sus estrechos bolsillos y colocan a esta población en un escenario de miseria extrema. Porque, obviamente, esta gente necesita usar esas vías concesionadas por Villarán —pero construidas por el Estado para uso gratuito— para acudir a su trabajo, asistir a algún hospital, hacer trámites, etc. Y cada vez que suben a algún microbús, un bus o lo que fuere, esos ciudadanos pagan con sangre el capricho de Villarán, ávida por volverse millonaria alentando que extranjeros se beneficien de aquellos recursos de nuestro Estado, llenándose los bolsillos con el sufrimiento de millones de peruanos menesterosos.
Pese a ello, la envilecida Villarán se jactaba de defender a los pobres gritando: “Soy izquierdista, socialista”. Claro. Así son los socialistas: explotadores de los pobres, culpando a la derecha de las corrupciones y de los robos fabricados por su izquierda corrompida.
El propio Ministerio Público lo certifica así: “En el año 2021, Susana Villarán permitió un reajuste de tarifas de peajes de las vías administradas por LAMSAC, a cambio de que la exautoridad edil obtenga apoyo económico para financiar su campaña de reelección en el sillón municipal el año 2014”. ¡Aunque, al final del día, Villarán pactó que este “reajuste” extorsionador se prolongue durante muchísimos años más!
Sin embargo, Villarán vive tranquila tras haber cometido semejante crimen. No solo contra el Estado, sino contra la gente necesitada. ¡Porque ella se ha enriquecido a costa de la gente más pobre! Aquella que, precisamente, necesita usar diariamente aquellas vías afectadas por los peajes concedidos por la izquierda, que ahora están sujetos a tarifas que suben exponencialmente cada vez que se le ocurra a aquella empresa foránea, que opera tan sustancial negocio concedido por Villarán a cambio de recibir ¡once millones de dólares!
Entiéndalo, amable lector, ¡así de corrupta y falsa es —y será siempre— la izquierda, amable lector!

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