Venezolanos en Perú: prepárense para la purga

Perú es mi casa, mi hogar. El vasto país que nos vio nacer, crecer y desarrollarnos. Ese país que, gracias a su gente trabajadora, salió del hoyo en el que estuvimos sumidos por muchos años. Nadie más que los hijos de este país puede sentir más amor por la patria donde abrimos los ojos. Ese mismo país, en su infinita bondad, le abrió las puertas de una nueva oportunidad de vida a casi dos millones de venezolanos que escaparon de la miseria de su fracasado país y hallaron en el nuestro un nuevo comienzo.
El sentimentalismo inservible de algunas personas sugiere que debo separar la basura del trigo, cuando se trata de los venezolanos de bien y de la lacra. En mi argumento, posición y tesis que defenderé hasta el final, diré que no será difícil hacerlo. En una inminente purga, cuando la basura es evidente y abundante, el trigo se cuenta con los dedos. Según “cifras” -no actualizadas-, nuestro país alberga a más de 1 millón 500 mil venezolanos que ingresaron al país desde 2018. Sin control migratorio y con miles de venezolanos sin identificar, las cifras se acercan a casi 2 millones de estos en territorio peruano.
Ahora bien, si ampliamos el panorama, tenemos más datos que analizar de este universo migratorio. Más del 35,3% de la población venezolana, en cifras que ingresaron a Perú hasta 2023, no cuenta con documentos legales que los reconozca en el sistema y puedan ser rastreados. Es decir: más de 500 mil están pululando en las calles y no sabemos quiénes son. Asimismo -y este dato es muy interesante-, el 75,3 % de los migrantes venezolanos encontraron en Perú tanta estabilidad y tranquilidad que sus planes de trabajo se convirtieron en la posibilidad de vivir en el país. ¿Quedarse a vivir en mi casa? Perú.
LA PURGA
Los delincuentes venezolanos son sanguinarios, malnacidos, y han dejado muy claro su desprecio por la vida humana. En 2019, una organización criminal venezolana, para demostrar que son sanguinarios, ordenó la muerte y descuartizamiento del venezolano Rubén Matamoros Delgado y del peruano Jafet Torrico Jarasu. Además, ordenaron distribuir las partes de los cuerpos por todo Lima. En 2022, las comisarías registraron a más de 17 mil venezolanos detenidos por cometer delitos contra la vida, la salud y la libertad de los peruanos. Los niveles de victimización de nuestra población se han incrementado de 22 % en 2022 a 29 % en lo que va del año 2024. Las extorsiones han aumentado en un 500%, siendo los dueños del monopolio de este delito, ¿adivinen quiénes? Los venezolanos. El 2023 cerró con más de 13 mil bodegas extorsionadas, y en los primeros meses de 2024, más de 5 mil. La extorsión es un problema muy serio en nuestro país.
Un venezolano correcto aceptará las normas que el país ordene para la protección de su gente, ellos incluidos; protección de su cultura y el sistema económico. Todo venezolano ilegal será deportado. Todo venezolano que se rehúse a mostrar documentos será detenido y se iniciará un proceso de deportación. Si no firma un documento que certifique todo esto, tendrá pena de cárcel y posterior deportación si vuelve a cometer el hecho.
Todo venezolano deberá registrar la vivienda donde reside, y no podrá cambiar de lugar durante un año completo. Se vienen años de guerra con las mafias extranjeras que llegaron a destruir nuestra economía y nuestro país. Se supone que llegaron al país para trabajar, no a burlarse del Perú, asesinar y extorsionar a nuestros emprendedores y, mucho menos, a vivir del Estado. Estas medidas serán determinantes para separar la basura del trigo.

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