Vela Barba se lanza con todo
La Junta Nacional de Justicia debiera poner en su sitio al fiscal Rafael Vela Barba, por enfrentarse a la Autoridad Nacional de Control del Ministerio Público y faltarle el respeto a su superior, fiscal supremo Carlos Muñoz León, quien le ha suspendido ocho meses y medio en sus funciones como coordinador del Equipo Especial Lava Jato, por comentar aspectos de procesos en curso e interferir en las funciones de otros órganos estatales. Es evidente que el equipo de fiscales, liderado por Vela, ha fracasado al no haber acusado ante un juez a un solo imputado del caso Lava Jato. Por si fuese poco, Odebrecht ha quedado libre de toda culpa y exonerada de todo pago por resarcimiento al Estado, amparada en un nefasto pacto -aún secreto- que le ha mermado miles de millones de soles al Perú. Hay muchas más inconductas de Vela Barba contra su propia institución -el Ministerio Público- que implican faltas sumamente graves. En este orden de ideas, detrás de esta pataleta de Vela Barba aparece la discordia existente entre la Junta Nacional de Justicia JNJ y el Ministerio Público.
En rigor, la pugna por retomar el control de la Fiscalía que, hasta hace casi dos años, ostentaba la mafia caviar (…) hasta que acabó elegida la fiscal de la Nación doña Patricia Benavides, y el Congreso determinó iniciarle un proceso investigatorio a Zoraida Ávalos. ¡Desde allí ardió Troya! La exfiscal Zoraida Ávalos apeló a la JNJ, y ésta recurrió a la CIDH, desatándose un feroz combate por volver a controlar el sistema prejudicial que, durante casi un cuarto de siglo, ha estado manipulado -en forma monopólica- por los caviares. Nominalmente la fiscal Patricia Benavides “respalda” a Vela Barba. Sin embargo, los caviares -padrinos de Vela Barba- buscan deponer a Benavides y reinstalarse -posiblemente encabezados por Vela Barba- en la cúpula de la Fiscalía para volver a controlar el Ministerio Público; y en paralelo, tener acceso a la Corte Suprema, a través del chantaje que ejercerían desde la Junta Nacional de Justicia manteniendo, removiendo o nombrando vocales supremos.
El daño causado por los caviares -infiltrados desde inicios de siglo en nuestros ejes de poder político, jurídico y social- es muy grave. Un clan de bribones izquierdosos, capaces de pactar con el diablo para, desde la puerta trasera, gobernar este país judicializando la política y politizando la justicia. ¡Basta de prepotencia caviar! ¡Ya basta de pusilanimidad de quienes no lo son! Lo único que saben hacer estos mafiosos es chantajear al Estado, apelando a la intriga, la cizaña, el chantaje, la mentira y la trampa. No debemos permitir que siga gobernándonos esta minoría (ultra corrupta caviar) que ha estado -y sigue estándolo- metida en cuánto escándalo de corrupción se conozca. ¡De allí su desesperación por recuperar poder para evitar que la Justicia le caiga encima! Si los actuales miembros de la JNJ respaldaran a Vela Barba -ejerciendo su actual pacto abyecto con los caviares- el Congreso deberá destituirlos y designar a nuevas autoridades. ¡Esta vez bien calificadas para dirigirla!
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