Te quise cerrar pero te pido pensión

Nos sorprendió a todos la noticia donde el Segundo Juzgado Constitucional Transitorio declaró fundada la demanda presentada por el expresidente Pedro Castillo contra el Congreso de la República, ordenando que se le otorgue una pensión vitalicia y, además, los beneficios administrativos que otorga el Congreso, como un trabajador técnico y otro auxiliar.
Esta decisión descabellada y fuera de todo análisis lógico es, en buena cuenta, un premio para los dictadores y un pésimo mensaje para quienes tienen en su cabeza el pensamiento extremista, venga de la izquierda o de la derecha.
Las decisiones jurídicas también tienen que ver con la gobernabilidad del país. Una mala decisión jurídica puede vulnerar la estabilidad política de una nación, por lo que los jueces, fiscales, miembros del Tribunal Constitucional y otros del sistema judicial-constitucional tienen que ser prudentes en sus decisiones y deben evaluarlas sobre las aristas también políticas.
¿Qué mensaje emite el Segundo Juzgado Constitucional Transitorio sobre la democracia a la sociedad y a aquellos que tienen en su cabeza sentimientos extremistas y totalitarios? Estoy seguro de que las personas con pensamientos torcidos estarán aplaudiendo la decisión del Poder Judicial y riéndose de aquellos que defendemos la democracia, por más imperfecta que sea.
La Ley N.º 26519 establece en su artículo segundo que el derecho de la pensión para un expresidente constitucional de la República —que equivale ahora a unos 30 mil soles, que es lo que recibe un congresista de la República— se suspende cuando el Congreso haya formulado acusación constitucional, salvo que la sentencia judicial los declare inocentes.
El Congreso ha hecho bien en presentar una apelación a la sala respectiva, en el sentido de que no puede ser aplicable la disposición del juez constitucional, por cuanto hay una acusación constitucional en trámite, pequeño aspecto que el juez constitucional seguramente no ha visto.
Lo cierto es que hay que ser bien fresco para pedirle pensión al Congreso cuando el peticionario lo ha querido cerrar, ¿no les parece?
El Congreso debería, de una vez por todas, modificar la Ley N.º 26519, estableciendo que las pensiones de los expresidentes constitucionales deberían pagarse por la Presidencia del Consejo de Ministros. La pensión para los expresidentes nace porque los expresidentes constitucionales eran senadores vitalicios, y el pago se consideraba dentro del presupuesto del Congreso. El Congreso debe sincerar las cosas para que ese pago lo asuma el Poder Ejecutivo.

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