Santa Claus Soto

Abusando de la autonomía congresal, la Mesa Directiva del Parlamento que preside Alejandro Soto, el “Papá Noel del Legislativo”, utiliza las arcas fiscales para beneficiar una vez más económicamente a los 130 “Padres de la Patria” y sus casi 4,000 trabajadores, e ignoran el 83% que desaprueban su gestión.

El Santa Claus Soto con la anuencia y beneplácito de sus vicepresidentes (los Reyes Magos) Arturo Alegría, Waldemar Cerrón y Rosselli Amuruz, siguen sumando ingresos que en diciembre bordean los S/53,220, lo que representa casi 60 sueldos mínimos vitales.

En noviembre la Mesa Directiva aprobó la entrega de tarjetas electrónicas de consumo por S/1,700 (S/200 más que en diciembre de 2022) para todo el personal del Poder Legislativo.

Hace menos de un mes se conoció que, sin sustento técnico, Soto y sus vicepresidentes aprobaron un bono de S/9,900 en favor de los 130 legisladores “por las horas extras y el trabajo acumulado” (?), arguyó entonces Arturo Alegría, amparándose en un convenio colectivo suscrito con el Sindicato de Trabajadores del Congreso (Sitracon), pero… ¡Los congresistas no son sindicalizados!

El sueldo de un congresista es de S/15,600 que en diciembre se duplica debido a la gratificación por Navidad haciendo un total de S/31,200, a esto hay que agregar S/7,617.20 por asignación por desempeño de la función congresal que, como lo ha reconocido el congresista Diego Bazán, forma parte de la remuneración del parlamentario y tiene el propósito de compensar los descuentos de ley a los que está afecto el sueldo. Otros conceptos recibidos este mes son el bono de S/9,900, S/2,800 por Semana de Representación (A pesar de que la legislatura concluyó el 15 de diciembre, sin embargo, se van de Semana de Representación del 18 al 22 de este mes) y S/1,700 por el aguinaldo navideño, en total apenas S/53,217.20.

A diferencia de lo ocurrido con el bono entregado a inicios de mes, en esta ocasión la mayoría de los parlamentarios cerró filas en defensa del aguinaldo navideño (1,700 soles), pero también de la bonificación (9,900 soles). “El congresista no tiene vacaciones y no exijo pago, yo estoy tranquilo, pero el congresista cuando pide 5 días se le descuenta sin goce de haber”, se quejó Bazán, presidente de la Comisión de Ética.
El mismo tono plañidero utilizó el segundo vicepresidente del Congreso, Waldemar Cerrón, al afirmar “No he visto más cuestionamientos que de la prensa, que viene con una situación de inquisidora de tratar de hacer quedar mal al Congreso”, indicó; cuando ellos por angurrientos quedan mal.

Carlos Anderson indicó que no hará efectivo su aguinaldo. “No creo que los congresistas necesitemos ese aguinaldo adicional por más que sea de ley. Este Congreso ha demostrado una y otra vez que solo le interesa lo propio, está de espaldas al país”, añadió, tras recordar el aumento en S/200 millones del presupuesto del Parlamento para el próximo año que será de 1,084´148,285 soles y del cual más del 80% se destinará al pago de remuneraciones y obligaciones sociales.

Este año se otorgaron tres bonos, dos con José Williams, ya que en abril los congresistas y trabajadores recibieron S/9,900 por “situaciones coyunturales que se viven en el Perú” y en junio se dio una bonificación para asesores y personal de confianza que fluctuó, de acuerdo al tiempo laborado, entre los S/7,200 y S/14,400 y con Santa Claus Soto los 9,900 más su tarjeta de 1,700.
Toda una vergüenza nacional.

Mira más contenidos siguiéndonos en Facebook, Twitter, Instagram, TikTok y únete a nuestro grupo de Telegram para recibir las noticias del momento.