Qué tal desaire a Puno
La Feria del Libro de San Borja, que acaba de inaugurarse, está dedicada a la región Puno. Sin embargo, esta dedicatoria no pasa de ser un enunciado, sin comprometer realmente a lo esencial, es decir Puno como centro productor de libros, fuente bibliográfica en el Perú. Sin habérselo propuesto, en el mejor de los casos los dirigentes de la Cámara Peruana del libro, han usado el nombre de una ciudad sin justificación.
En estos años, Puno y el mundo, empiezan a conmemorar el centenario de las vanguardias, de autores y obras tan importantes como Carlos Oquendo de Amat (el poeta peruano más traducido a idiomas extranjeros, después de Vallejo), de libros como Ande y Kollao de Alejandro Peralta, del Boletín Titikaka, de un libro prístino como “Balseros del Titikaka”, y muchos otros. Nada de esto pudo traslucirse en la inauguración de la Feria del Libro de San Borja; solo un insípido escritor norteño que habló de la mariposa monarca y de “un gringuito” que llegó a Papa.
La feria bien pudo haberse llamado “Emilio Romero”, fundador de la ciencia económica en el Perú; “José Antonio Encinas”, maestro de los maestros del Perú; “Federico More”, padre del periodismo peruano; “Gamaliel Churata”, el más importante filósofo latinoamericano; en fin, nada de esto es tangible en un espacio tan interesante como el pasaje Carpaccio del distrito de San Borja. Dentro de la programación, cinco o seis conferencias al respecto, se diluirán dentro de las decenas dedicadas a otros temas. Esta era una oportunidad para promover una región rica en cultura y, al mismo tiempo, con una franja de pobreza extrema que afecta al 30 % de su población.
El municipio de Puno, como la universidad, la oficina desconcentrada del ministerio de cultura, con los exiguos recursos asignados por sus instituciones, han hecho lo posible para cumplir con su compromiso con el libro. Lo que llama la atención es la ausencia del gobierno regional. El señor Richard Hanco, se ha declarado enemigo del libro y por lo tanto de la cultura, comprensible si se encuentra encapsulado en su torre de bolsas de cemento, si está inmerso en las luchas intestinas con sus consejeros regionales, o en la incertidumbre de sus intereses personales. No es posible imaginar cómo Hanco egresó de la universidad. En relación con la Cámara Peruana del libro, es importante reconocer la personalidad de Ricardo Muguerza, quien tal vez se encuentra rodeado de personas no pertinentes para estos temas.
Por Omar Aramayo
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