¿Qué sucede cuando no tienes paz?

La paz es un estado existencial de los seres humanos, que no aparece por arte de magia, se construye a través de la experiencia de vida y la madurez. Muchas personas han alcanzado muchas cosas, títulos, grados, honores, felicitaciones, fortuna, en dinero, acciones, bienes inmuebles, muebles, socios de clubes, créditos abiertos en el mundo entero, han viajado por el mundo, han conocido las mujeres y hombres apuestos, poseen seguros de vida, vehículos, la vida les sonríe, han estudiado en los mejores colegios y universidades, han cultivado buenas relaciones sociales, han adquirido un buen estatus político, social, económico, cultural, los mejores cargos y puestos, el dinero no es el problema, incluso no lo saben en qué gastar, empero son incapaces de ayudar al prójimo, algunas personas se vuelven avaros, tiranos, egoístas, mezquinos, desconfiados, inseguros, alimentan el orgullo, la vanidad, el qué dirán, la apariencia, el lujo, la frialdad, lo fatuo, lo sofisticado, no salen a la calle sin las joyas, sin haberse pintado la cara, otras personas donan, ayudan en los asilos, orfanatos, a la liga contra el cáncer, sordomudos, ciegos, inválidos, discapacitados, contribuyen en buenas obras de bien para la sociedad, piense que son personas desprendidas, pero no existe ningún compromiso emocional, afectivo, lo hacen para que tenga una buena imagen de las personas y que en algún momento las necesite y tocarán la puerta por algún interés; y eso no es todo, muchos van a misa, se confiesan, comulgan, se dan golpes de pecho, se definen como católicos, otros son cristianos evangelistas, logrando ser pastores, viven del diezmo y la limosna, algunos han sido expresidiarios, adictos, alcohólicos, violadores y utilizan la palabra de Dios para sus intereses, tantos casos existen en el mundo y en el Perú, formando una elite, sin participación de los feligreses, pero les agrada comer bien, beber el buen vino, que les inviten, no gastar nada y a veces la vista se distrae hacia la mujer ajena, pero esta sociedad permite todo y mucho más, simplemente porque no se valoran a sí mismo, en consecuencia están en incapacidad de valorar a otras personas; sin embargo, no han encontrado “paz”. No está afuera sino dentro de ti, muchas veces hasta el final de sus días no han cambiado, inclusive se llevan a la muerte su falta de realización, inclusive este perfil de personalidad se prolonga hacia los hijos y los hijos de los hijos, la gente habla, los abuelos, los padres, eran igual, de donde viene el dicho popular “lo que se hereda no se hurta”.

La “paz” es la realización del ser humano, es un estado espiritual de la existencia, que permite percibir o ver la vida desde adentro y no lo que te rodea afuera, ni los logros materiales, es un éxtasis de amor a uno mismo y los demás, es transmitir lo bueno de la vida, para este logro, no interesa la clase social, la raza, las creencias, el sexo, la discriminación, los apellidos, las formas, las religiones, es un halo de tranquilidad, sosiego, que te permite navegar en aguas tranquilas y no tormentosas y llegar a buen puerto, es sentirse más y menos que nadie, es ser uno mismo con virtudes y defectos, que los puedes mejorar y corregir, donde no existe la envidia, que estás feliz de lo que eres, que no te asombra nada de la vida, que la ilusión es pasajera, lo que perdura son los buenos actos de los seres humanos y el amor, los sentimientos, la pasión, perseverancia, vehemencia que haces las cosas, que constituyes un buen referente para los demás, grábate siempre, que no puedes dar paz a nadie sí tu no la tienes, la disfrutas y la compartes, escudriña la vida existencial y la encontrarás, no te olvides nunca “que eres arquitecto de tú propio destino”.

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