Preocupantes similitudes entre Perú y Venezuela

Los ineptos que se aúpan al poder son los culpables del desastre de sus naciones y la desgracia de sus conciudadanos. Vizcarra es un ejemplo. Según el pepekausa Carlos Bruce, el kitchen cabinet que asesoraba a Pedro Pablo Kuczynski en la campaña electoral recomendó matizar la plancha presidencial con un provinciano. Suficiente con dos blancos: Kuczynski y Meche Araoz. Había que teñirla con alguien, digamos, “de otro nivel”. Como consecuencia apareció el nombre de Martín Vizcarra, ex gobernador de Moquegua. Fue escogido no por sus capacidades; no por su experiencia; no por tener talla de estadista. ¡Únicamente por su color de piel! Y ahí está el detalle, como decía Cantinflas. Ahora un primerizo provinciano gobierna el Perú por obra y gracia de los geniales consejeros electorales de otro inútil, como PPK.

Hablamos del neófito apellidado Vizcarra, incapaz de gobernar democráticamente en un Estado de Derecho. Aunque diestro en hacerlo bajo el precinto del autoritarismo. Como lo grafica su perversa campaña de chantaje al Congreso, amenazándolo con la clausura si no legisla según el dictado de su gobierno y en los tiempos que él le imponga. Esto, amable lector, es tiranía disfrazada de democracia sudaca. Esto hizo, exactamente, el opresor Chávez en Venezuela. Leamos extractos de lo que advirtió Carlos Andrés Pérez; con quien podremos discrepar respecto a su gestión, pero no sobre su talante democrático ni menos aún sobre sus capacidades políticas. “El gran desconcierto, rabia, frustración por la situación que estamos viviendo –eso que usted llama estabilidad de paz- lleva al pueblo a exigir un cambio profundo y radical. Pero en su ceguera, olvida que el vengador que llegará para solucionar las cosas nos hundirá en circunstancias peores que las que estamos viviendo. La miopía es de tal naturaleza que la gente no se da cuenta que Chávez dañará todo el proceso institucional de Venezuela. Estos (personajes como Chávez) son unas fenómenos que agarran un país, lo desquician, lo sacan de la vereda. Y hasta que la gente no se de cuenta que está enmarañada en la trampa, no reaccionará. Yo quisiera que los venezolanos se den cuenta que van a hundir al país en una tragedia que no debe vivirla Venezuela. No obstante parece que tenemos que llegar abajo y trepidar sobre el fondo para volver a levantarnos. Chávez es la dictadura. Acá no habrá ley, derecho de expresión, las cárceles se abrirán para quienes no estén de acuerdo con el gobierno, no se permitirá disentir a nadie. Y los problemas de corrupción se harán más graves aún.”

Apostilla. Todo apunta a que esta semana arrancaría otra profusa, millonaria campaña publicitaria del gobierno para “levantar los bonos” del inútil presidente Martín Vizcarra. ¡Aunque a la mona la vistan de seda, mona se queda! Otro gasto superfluo y vano que sólo engordará los bolsillos de la prensa corrompida que apoya al régimen Vizcarra; no por convicción sino sólo por evitar el crac económico que la amenaza. Nuevamente la mafia mediática se verá favorecida por el avisaje que pagará usted, amable lector.

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