Pena de muerte para el extranjero que asesine a un peruano

El migrante, legal o ilegal, que asesine o cometa homicidio intencional contra un peruano será sentenciado a muerte. Si el asesino u homicida logra escapar –que lo dudo mucho, porque en un gobierno mío ningún criminal podrá escapar del destino que le espera–, será declarado enemigo del Perú y se dará recompensa internacional para hallar su paradero. ¿Podemos entender los peruanos que nuestro país está en una guerra que está perdiendo? Si el Perú no es un lugar seguro y próspero para sus propios hijos, los peruanos, no lo será para nadie. El Perú para los peruanos.
Más de 2,100 peruanos fueron asesinados en 2024. Más de la mitad fueron peruanos asesinados por el sicariato. ¿Quiénes están exportando a nuestro país sicarios que cobran una mísera cantidad por quitarle la vida a una persona? Sí, Venezuela, porque en ese país se oficializó la criminalidad como un Estado híbrido: la combinación de la criminalidad con el Estado-Gobierno. Tenemos generaciones de delincuentes que se formaron para ello desde niños o adolescentes. ¿Por qué? En el año 2000 se instauraron en Venezuela, por órdenes de Hugo Chávez, los primeros grupos híbridos. ¿Cuál era el objetivo? Mantener al maldito socialista en el poder. Pero eso no es todo. Dentro de estos grupos híbridos se conformaban redes criminales: extorsionadores y sicarios.
Esa generación de sicarios, extorsionadores, pandilleros y sus familias ha migrado a Perú para destruirlo. Se estima que, en 2024, el 80 % de los asesinatos se realizaron con arma de fuego. Es un incremento del 40 % en comparación con 2020. ¿Qué significa ello? Los crímenes son más violentos, sanguinarios y sin ningún tipo de remordimiento o temor de matar. ¿Eso hemos dejado entrar y seguimos permitiendo que ingrese al país? ¿Por qué nuestras fronteras están abiertas? ¿A quiénes favorecemos con esta política de migración descontrolada y terrorista? ¿Por qué están destruyendo al país de esta manera? Un líder que en verdad ama a su país jamás va a permitir que un extranjero, sin importar la nacionalidad, ingrese a su país y asesine a su compatriota. Nosotros somos hijos de esta patria, y el país tiene que funcionar para que los peruanos puedan lograr sus metas y sueños en el suelo que los vio nacer.
Los venezolanos y todo extranjero, en su calidad de migrantes e inmigrantes, no pueden ser tratados como se debe tratar a un peruano. No podemos usar nuestros impuestos para mantener, cuidar y sostener a criminales en las cárceles ni a pandilleros en las calles; ilegales y personas no productivas que llegan a parasitar la economía e intentan a toda costa instaurar ese Estado híbrido que ha destruido, junto con el socialismo, a Venezuela. Un país destruido. ¿Eso queremos para Perú?
Hace unos días, dos policías fueron baleados por un delincuente venezolano que no tuvo ningún tipo de temor o resquemor por nuestra patria, que intentó asesinar a quien representa nuestra autoridad. Eso es una declaración de guerra. Van a destruir el país.

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