"Nos vamos todos"

El congresista Roberto Chiabra ha vertido una ingeniosa frase que refleja lo que podría ocurrir en el futuro cercano. Ha dicho que si el gobierno persiste en su provocador comportamiento, “nos vamos todos”. Es decir, el Congreso y el gobierno. El corolario sería, por supuesto, la convocatoria a inmediatas elecciones generales, obviamente cambiando a las autoridades electorales que convalidaron el fraude.
De hecho, muy rápidamente, son muchos los políticos, analistas y ciudadanos que han comprendido que la disyuntiva que vive el Perú ahora es la de la implantación de una dictadura chavista o la vacancia de Pedro Castillo –y Dina Boluarte, naturalmente– para elegir un nuevo gobierno.
Los motivos para esto son obvios. En primer lugar, no cabe duda alguna que Castillo, Vladimir Cerrón y sus secuaces, quieren acabar con la democracia rápidamente e imponer una dictadura comunista. Lo ha dicho el procesado por terrorismo y congresista de ese grupo, Guillermo Bermejo, dos gabinetes desaprobados y “chau Congreso”.
En realidad, no solo puede ser con dos gabinetes no aprobados, sino con dos ministros censurados o con cualquier pretexto, su intención es disolver el Parlamento, pero no para elegir otro libremente sino para gobernar por decreto, consolidarse en el poder y luego imponer una asamblea constituyente.
En segundo lugar, porque están avanzando rápidamente en pos de sus siniestros propósitos. Ya cambiaron toda la cúpula de las Fuerzas Armadas en lo que, probablemente, solo es el primer paso. Cuando conozcan un poco más a las personas y detecten a los proclives a la sumisión y la deshonestidad, los cooptarán y establecerán el control político sobre las instituciones castrenses, un paso indispensable para imponer su dictadura.
Están tratando también de crear las “rondas” urbanas, subterfugio para constituir grupos de matones armados para reprimir a la oposición.
En tercer lugar, porque han designado al peor gabinete de la historia, cuando el Perú se debate en medio de una gravísima crisis económica, de salud y de seguridad. Los ministros y funcionarios que están nombrando no solo son simpatizantes de Sendero Luminoso y el MRTA o notorios agentes cubanos, sino una caterva de incapaces y sinvergüenzas, que hundirán al país en una espiral de miseria y corrupción.
Como bien ha precisado el ex ministro y ex congresista Carlos Bruce, todo esto “califica como incapacidad moral permanente y la democracia tiene que activar los mecanismos de defensa AHORA antes que sea tarde”. (7/8/21, Perú.21).
Es decir, el Congreso debería vacar inmediatamente a Castillo, antes que ellos lo disuelvan y liquiden la democracia. Lo preocupante es que, como advierte Mario Ghibellini en El Comercio, la mayoría opositora que existe en el Congreso no ha mostrado reflejos hasta ahora y “han dado señas de un estado de orfandad y desorientación que hace temer por el futuro de la misión de contrapeso al Ejecutivo que hemos puesto en sus manos”. (7/8/21).
Tienen que comprender la gravedad de la amenaza y ponerse a la altura de las circunstancias.

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