Muerte impune
En el caso de la muerte de los bebés, por falta de incubadoras, está pasando desapercibida la Superintendencia Nacional de Salud (SUSALUD) entidad encargada de proteger los derechos en salud de la población. De acuerdo a su página web “…orienta sus acciones a empoderar y colocar al ciudadano en el centro del sistema de salud nacional, sin importar donde se atienda o su condición de aseguramiento”, lo cual como se ha demostrado es una falacia, por no decir homicidio culposo.
Agregan que “…desarrolla sus acciones en base a cuatro líneas de acción: Promoción, protección y restitución de los Derechos en Salud en el país. Prevención de la vulneración de los Derechos en Salud frente al sistema de salud. Coadyuvar la Gestión del Riesgo para alcanzar de manera efectiva los logros institucionales de los integrantes del sistema de salud y modernizar la gestión institucional promoviendo espacios de articulación intersectorial y de integración de sistemas de información, para la óptima protección de los derechos en salud”. Mediante Resolución Suprema No. 007-2019-SA, del 13 de abril último, la ministra de Salud y el presidente Vizcarra nombraron a Carlos Manuel Acosta Saal, como miembro de SUSALUD, en representación del MINSA, quien lo preside en calidad de Superintendente.
Carlos Acosta se encargará de promover, proteger y defender los derechos de las personas al acceso a los servicios de salud, supervisando que las prestaciones sean brindadas con calidad, oportunidad, disponibilidad y aceptabilidad, informó en ese entonces la ministra. “El trabajo que lleva a cabo Susalud garantiza la protección de los derechos en salud de cada peruano”, agrega. “Susalud es el gran soporte de las ejecutoras, de los centros de salud, debe cumplir las normas y la ley. No vamos a permitir la corrupción en ninguna instancia del Minsa y esta entidad debe poner mano dura a esto”, sin embargo, no han hecho nada.
Carlos Acosta, explicó que su labor se basará en un modelo de gestión de riesgos, de compromisos compartidos con los establecimientos de salud. Su institución no será un ente fiscalizador, sino preventivo. Sin embargo, no previnieron ni hicieron nada, sobre sus hombros está la muerte de casi 2 millares de bebés este año, aquí hay una responsabilidad política que incluye al mismo Vizcarra que nombró a la ministra y al superintendente de SUSALUD.
En enero de este año el presupuesto público del sector Salud subió a más de 20 mil 647 millones de soles, sin embargo, a cuatro meses de terminar el año solo se ha ejecutado menos de la mitad de estos recursos, cuando en realidad ya deberían haberse gastado casi el 70%. Apenas el 9 % del presupuesto se destina a la compra de medicinas y equipos médicos, quirúrgicos o de laboratorio como incubadoras.
En el caso de los recién nacidos fallecidos, no se trata de un tema de falta de presupuesto sino de gestión pública, de capacidad e idoneidad profesional de la cual adolece en gran parte todo el Poder Ejecutivo.