Más allá del cuadrado
Con toda la calma que cada uno traía conjugamos nuestros mirares, pensares, comparaciones y recuerdos que abrieron buen curso a la conversa sobre ese terreno en que al hablarlo viven, mueren, sobreviven héroes, villanos, mártires desmemoriados, pretensiosos santos, ignorantes y desubicados, entre quienes, tenemos la convicción, muchos, muchísimos tuvieron, tienen cerradas puertas, ventanas sin permitirse abrirle paso al vecino y lo arrincona, separa y sobre él, sin dolor de corazón ni propósito de enmienda, pueden enfilar y descargar toda la batería que lo mantendrá en esa condición de apartado y machucado. El tema tiene de crudas asperezas observadas, de claridades de visión vividas que a Ignacio Poblet y a mí nos permiten el convencimiento que en el tan variado catálogo humano también contamos con quienes tienen de propósito ejecutado la convivencia con puerta abierta, diálogo y participación ofreciendo y recogiendo proyectos, enseñanzas, ideas de cambio rescate y evolución positiva en que el bien común es norte y práctica con niveles de calidad y respeto logrando resultados posibles visibles en la vida cotidiana aliviándola del acoso de la explotación, olvido, mezquindad y envidia.
Un viento que avisa temblor pasa rápido. Regresemos con Ignacio Poblet a la sala Limaq del Museo Metropolitano de Lima, donde hasta el domingo 3 de marzo exhibe La cuadratura de la niebla, selección de sus trabajos en óleo sobre lienzo fechados entre 2017 y 2023. En los varios formatos Ignacio se sirve, curiosamente, de colores muy diáfanos para mostrar esos tan absurdos y no tan brillantes lados de la conducta humana que en nuestra conversación nos dieron tema, ideas y personajes que construyen y destruyen la historia de Lima recordada por él en estas imágenes desarrolladas en varios planos simultáneos mostrándola, comentándola, como ciudad única con sus horizontes históricos en el antiguo paisaje urbano y el desierto sometido, que señala como escenarios ocupados mutilados avasallados con el atropello, el olvido individual, colectivo, privado y oficial con la mirada indiferente que esquiva ese lamentable futuro que da tema y es razón de esta pintura con proyecto, ejecución cuidada, detalles recogidos que le permiten señalar épocas y sistemas. Trabajo que detiene y puede ser, dar y abrir puerta a la pregunta con respuesta. Una pintura que tiene mucho más que oficio.
Ignacio Poblet egresó en la Escuela Nacional Superior Autónoma de Bellas Artes del Perú en 1997, año de, su primera individual, Vivencias muertas, en la galería de la Caja de Crédito Popular. La primera colectiva la tuvo en Miami, 2007, en One Brickell Square con Three dreams come true. En 2015 sentó base en Cali, Colombia, desde donde ha trazado un interesante recorrido con exposiciones individuales y presencia en colectivas en Bogotá, Popayán, Pereyra. Dio un salto de regreso a Lima para una colectiva en el Jockey Club. Participó en el ART3F Salon International d´Art Contemporain, Toulouse, Francia. En años anteriores Ignacio, que llevó cinco de dibujo en la ENSABAP, fue hombre de prensa con sus ilustraciones de historietas y carátula en Chesu, La Chuchi y Don Pelotas. La selección puesta en el Museo Metropolitano es una buena oportunidad para recorrer los mensajes que son testimonios, anuncios y en cierta manera confirmaciones de las destrucciones anunciadas.
La cuadratura de la niebla. en exhibición de martes a domingo, 10.00 a.m. a 5.00 p.m. , va hasta el domingo 5 de marzo en la Sala Limaq del Museo Metropolitano de Lima. Av. 28 de Julio, esquina Petit Thouars. Lima Cercado.
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