ÚLTIMA HORA
PUBLICIDAD

Marinos de Guerra del Perú y su Primer Bicentenario

Imagen
Fecha Publicación: 03/11/2021 - 21:00
Escucha esta nota

Por Juan Carlos Llosa Pazos

Este último 8 de octubre ha tenido un especial significado para los marinos de guerra del Perú ya que celebramos con orgullo y fervor patriótico, nuestro primer bicentenario.

El Estatuto Provisional del Generalísimo don José de San Martín, promulgado el 8 de octubre de 1821, consideró entre otras disposiciones de orden organizativo estatal, la existencia de fuerzas navales para el nuevo estado, el mismo que las huestes patriotas luchaban por imponer en los antiguos dominios de Túpac Inca Yupanqui, el inca navegante.

Para ese entonces ya se contaba con algunos buques de guerra, o capturados a los realistas o adquiridos por el Protectorado, así como una pequeña oficialidad y tripulación a cuyas órdenes se puso al entonces Capitán de Navío Martin Jorge Guise, fundador de nuestra Armada.

Desde ese momento, nuestros marinos han dado permanentes muestras de patriotismo, valor y audacia en el combate, a bordo de unidades navales en el Pacífico, en la Amazonía y en los Andes peruanos; así como gran capacidad profesional para desafiar, contener y derrotar a los enemigos externos e internos que han atentado contra la seguridad nacional.

Es asimismo esta magna fecha, ocasión para rendir homenaje a los tripulantes de nuestra primera escuadra, la misma que consolidó la libertad del Perú y de América, así como a los valientes guerreros navales que en la gesta de Punta Angamos, se cubrieron de gloria a bordo del monitor Huáscar, a órdenes de su comandante, el Gran Almirante del Perú don Miguel Grau Seminario, uno de los héroes navales más reconocidos en la historia universal.

Incontables vientos han soplado en estos doscientos años, pero el espíritu guerrero de los primeros días se mantiene invicto.

Es aquel legado el que nos obliga a estar preparados para combatir ahí donde la Patria lo requiera, como en los accidentados caminos de Padre Abad contra los enemigos internos del Perú, los terroristas, aquellos feroces criminales que no perdonaron la vida ni de niños. Estos asesinos de poblaciones indefensas se aprovecharon de que no pocas de ellas fueran víctimas de abusos y de la indiferencia del resto del país.
Gran parte de los éxitos militares contra el terror se debieron al coraje de muchos marinos de diferentes especialidades, que dieron un aporte decisivo para el sometimiento del enemigo, no sin antes derramar mucha sangre. Orgullosos de esas victorias y de los esfuerzos desplegados contra los efectos perniciosos de la pandemia del coronavirus, los marinos de guerra del Perú apoyamos decisivamente a las autoridades gubernamentales en salvar miles de vidas de nuestros compatriotas.

Aquello adquirió especial relevancia con el accionar de las Fuerzas Fluviales en la Amazonía, durante uno de los momentos más duros de la lucha contra el enemigo invisible. Esta batalla que libramos codo a codo con médicos, enfermeros, soldados, aviadores y policías, ha sido muy aleccionadora y compleja, pero la afrontamos inspirados en la memorable frase que exclamara en lo más recio del Combate de Angamos, el Teniente Primero Enrique Palacios: “En este buque nadie se rinde”.

Guiados por tal mantra, nos sabemos listos para enfrentar los desafíos que el mar nos imponga en la era del ciberocéano y de la incertidumbre global.

*Capitán de Navío,
Director del Instituto de Educación Superior
Tecnológico Público Naval - CITEN

Mira más contenidos siguiéndonos en FacebookTwitter Instagram, y únete a nuestro grupo de Telegram para recibir las noticias del momento.