ÚLTIMA HORA
PUBLICIDAD

Maestro

Fecha Publicación: 06/07/2019 - 21:10
Escucha esta nota

Todos recordamos, sin duda, a aquellos maestros que, durante nuestros años de estudios, no solo nos enseñaron los cursos correspondientes sino que también nos orientaron para poder desenvolvernos en los caminos difíciles que nos presenta la vida.

Recuerdo cuando en la universidad se decía que el doctor Jorge Castañeda, eminente catedrático sanmarquino de Derecho Civil, nunca se jalaba a nadie pero que un 11 en sus exámenes equivalía a salir reprobado y que, interrogado sobre esta peculiar actitud, el doctor Castañeda había respondido: ”A ellos, se los jalará la vida”.

Hay maestros y profesores. Los primeros, responden al espíritu superior de personajes como Castañeda o el maestro arequipeño Ernesto Valz quien desde muy joven contribuyó en forma desprendida y ejemplar a la alfabetización en los lugares más recónditos de su terruño.

Los segundos, constituyen, lamentablemente un porcentaje importante de los 600 mil educadores que hay en el Perú y  se caracterizan por una militante politización que los aleja de principios fundamentales de la actividad docente.

Más allá de este considerando, es cierto que los docentes del sector público, que suman unos 420 mil, están entre los peor pagados de América Latina y, desde el gobierno de Humala, padecieron por la ausencia de indispensables actualizaciones que mantuvieran al día sus conocimientos.

Se calcula que solo un 37 por ciento de las escuelas del Estado se encuentran en buenas condiciones y que la brecha de infraestructura educativa es del orden de 100 mil millones de soles, en un escenario en el que, durante el segundo régimen de García ,se gastaron 1300 millones en remodelar “colegios emblemáticos” sin el requisito de licitación pública despriorizando escuelas que sí requerían una urgente inversión para servicios esenciales como agua y desagüe.

No sorprende, por tanto, la enorme distancia que arrojan los índices educativos comparativos del sector público y el sector privado en el Perú ni puede sorprendernos el atraso existente en el primero dada la forma como ha sido secularmente administrado tanto en la formación de docentes ,como en la construcción, distribución y mantenimiento de las escuelas y el diseño y actualización de una currÍcula que, desde la eliminación de la Educación Cívica como curso, ha perdido el énfasis en la esencial enseñanza de los valores.

Pero hoy celebremos a los maestros heroicos, los de verdad, los que siguen forjando la Patria.