Madre de Dios y Loreto abandonados frente al dengue por el Gobierno de Vizcarra
El “coronavirus” ya está en el continente, es solo cuestión de días o de horas para que llegue al Perú, sin duda hay que tomar todas las medidas posibles y difundir por todos los medios a nuestro alcance lo vital que es la prevención para evitar que su propagación se salga de control en nuestro país (pero sin general pánico) sobre todo porque el Ministerio de Salud ha sido encargado sucesivamente a gente sin sensibilidad social o sin firmeza y claridad para la acción.
Sin embargo, al mismo tiempo no hay que dejar de señalar que lo que no es una amenaza potencial sino una realidad, cruda y dolorosa, así como actual es el dengue, cuestión poco cubierta además por la prensa nacional, así como otros padecimientos del Perú popular y provinciano. Los hospitales no están listos para afrontar la magnitud del asunto y no se dan abasto para lidiar con la crisis. Agrava la situación el hecho de que esta circunstancia se repite año tras año y además en un contexto en donde el inquilino de Palacio ofrece aseguramiento universal de forma demagogia y únicamente buscando el aplauso. Múltiples testimonios, de gente que vive en Loreto y Madre de Dios, dan cuenta del abandono que padecen respecto al Gobierno central, del cual no saben nada y cuyas autoridades no los ayudan.
Por ejemplo, Moisés Panduro de Loreto nos cuenta: “en Loreto está azotando el dengue, el gobernador regional está en Viña del Mar y el MINSA -y menos Vizcarra- aparecen. Los hospitales colapsan”; por su parte Elka Villa de Madre de Dios afirma:” MINSA: por favor si se preocupan un poco más por la gente que está infectada con dengue en Madre de Dios, hay quienes no van a los centros de salud porque han colapsado y por mala atención”.
Solo entre estas dos regiones -relativamente pequeñas respecto a Lima o Piura o Arequipa en clave demográfica- ya reportan más de 6 mil infectados y 27 muertos. Casi 30 compatriotas que han perecido ante la indolencia y pasividad del régimen de Vizcarra, administración en donde todos veranean, como si no entendieran que las más altas funciones públicas como la de Ministro de Estado representan requieren una entrega de 24/7.
Da la impresión que la agenda social, de la que la Salud pública es parte fundamental, por más urgente que fuese no despierta el menor interés de un Gabinete con más mediocres y cuestionados por corrupción por cada parche que le hacen. Hace pocos días se conoció que el ministro Lozada del MTC favoreció extrañamente a Obrainsa; en Energía y Minas también hay objeciones. Pienso que a Vizcarra sólo le importa su continuidad en el poder, su artificial popularidad y sobre todo cumplir con los intereses del “Club de la Construcción” y de Odebrecht. ¿Es acaso que tenemos a un Presidente que cree tener corona. Sería el virus MVC-21?