Los países no son grandes por lo que tienen, sino por su gente

El Perú para los peruanos. He tomado la decisión de conocer más a mi país, hablar con mis compatriotas, observar la dinámica social, económica y cultural de cada región, hacer esto por un verdadero amor a mi patria. Y no como el típico político que recorre el país en elecciones o previo a ellas solo para mostrar los dientes, comer rico y gratis, y hacer promesas inservibles para obtener un voto ignorante. Los políticos de siempre hablan mucho y escuchan muy poco. Ha llegado el momento en la historia republicana de nuestra patria de cambiar la mentalidad de nuestra gente.
Los países no son grandes por lo que tienen, sino por su gente. ¿Qué significado tiene esta frase? El mismo que cuando nos dicen que a una universidad la hacen sus alumnos; que los hijos son el reflejo de sus padres; o cuando decimos que la calidad de trabajadores de una empresa determina su éxito. Lo que tiene como talento un país es algo con lo cual ha nacido; pero ese talento no es nada sin disciplina. ¿Somos los peruanos disciplinados? No es una característica muy definida en nosotros. Sin embargo, en los últimos diecisiete años, cuando abrimos nuestro mercado al mundo, los peruanos nos hemos posicionado como emprendedores. El Perú es un país emprendedor.
Esa fuerza emprendedora, la inversión privada y la generación de empleo hizo que en cinco años, la pobreza pasara de 48% en el 2006 a 23% en el año 2011. A un país no lo sacas de la pobreza quitándole al rico para darle al pobre, ni mucho menos con asistencialismo. Al pobre vamos a ponerlo a trabajar.
El Perú para los peruanos. ¿Qué entendemos por esta frase? Si nosotros no amamos, cuidamos y protegemos lo nuestro, ¿cómo esperamos que otros lo amen, respeten y cuiden? Graba esto muy bien en tu mente, querido lector: el mejor capital que tenemos es nuestra gente. El país no se hizo solo; al Perú lo hizo su gente. ¿Lo hemos hecho bien? Veamos. Estamos cerca del 30% de pobreza a nivel nacional; migración descontrolada; terrorismo migratorio; 43% de nuestros niños menores de tres años viven con anemia, es decir, desnutridos. ¿Cómo esperamos formar cerebros brillantes si no se alimentan bien? Más del 87% de la población peruana vive atemorizada por la delincuencia, hoy más que hace cinco años y más que nunca. En nuestras regiones, el turismo ha disminuido en 40% con respecto a la pandemia. Permitimos que los políticos mediocres del Congreso legislen a favor de ellos, que la “justicia” libere a delincuentes, y que el Estado sea acaparado cada día por gente mediocre.
Solo basta con ver cómo un expresidente, Martín Vizcarra, nos empobreció un 10% en menos de dos años. Nosotros lo permitimos callados, sumisos, preocupados por nuestra conveniencia y manipulados con el miedo. Definitivamente no lo hemos hecho bien. Si queremos salir del tercer mundo, cambiar nuestra mentalidad es la clave. Un país realmente próspero, cuyas mentes están centradas en el trabajo y la generación de riqueza, no incrementa su pobreza de la noche a la mañana.

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