Los Cascos Azules son ejércitos de paz, no de guerra

Los denominados Cascos Azules de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) están en la mirada de la opinión pública internacional, luego de que Israel ha requerido a la ONU que sean retirados los ejércitos de la organización que se encuentran apostados en la zona de la frontera entre Líbano e Israel, donde viene operando el grupo miliciano Hezbolá, al que Israel persigue sin tregua una vez verificadas las incursiones con atentados del grupo extremista en el norte de su territorio, promovido por su apoyo a Hamás, el otro grupo miliciano al que Israel también considera terrorista, y que opera en la Franja de Gaza, territorio de Palestina contiguo a Egipto.
El secretario general de la ONU, António Guterres, que ha sido calificado de persona non grata por Israel, ha dicho que no moverán a los Cascos Azules de las posiciones que actualmente mantienen en la convulsa zona fronteriza libanesa-israelí, y hasta ha recordado al gobierno del primer ministro, Benjamín Netanyahu, que impactar contra las fuerzas de la ONU es dar un paso en contra del derecho internacional.
Pero, entonces, ¿qué son los Cascos Azules, realmente? Lejos de lo que muchos puedan creer, no se trata de fuerzas para la guerra como normalmente puedan contarlas los Estados. No. Los Cascos Azules son ejércitos de paz y por la paz, y fueron creados en 1948, conforme al espíritu y la letra de la Carta de San Francisco de 1945 —el tratado constitutivo de las Naciones Unidas— que aboga por el mantenimiento de la paz conseguida luego de la Segunda Guerra Mundial (1939-1945). Son formados y rápidamente constituidos como tales por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y por medio de una resolución de este órgano de la ONU que tiene a su cargo el monopolio del uso de la fuerza en nombre de la mayor organización política de los Estados del planeta.
Aunque es verdad que, para que se constituyan las fuerzas de paz, es necesario que sean parte de los ejércitos de los Estados miembros de la ONU, también lo es que no están hechas para la conquista, tampoco para ejercer el uso de la fuerza debido a un casus belli o motivo de guerra. Nada de eso. Actúan principalmente para poner orden donde se requiera y en nombre de la comunidad internacional, siempre priorizando la integridad de los civiles, que normalmente son aquellos que no intervienen en la guerra pero están en medio del conflicto.
Será difícil ver a los Cascos Azules desplazándose de la referida zona fronteriza entre Líbano e Israel, y mucho menos si, pidiéndolo uno de los Estados miembros de la ONU, como lo ha requerido Israel, no están de acuerdo, como parece ser este último caso. Veremos qué sucede, porque este complejo conflicto en el Medio Oriente sigue en desarrollo.

* Excanciller del Perú e Internacionalista.

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