Límites del multilateralismo
Tradicionalmente, la diplomacia ha sido clasificada en bilateral y multilateral; la primera desarrollada entre dos países y la segunda en el seno de los organismos internacionales. He esbozado una división muy simple pero para desarrollar estos dos conceptos es preferible ir de menos a más para comprender su vasta complejidad.
Las relaciones bilaterales entre dos países, léase Estados Soberanos conforme al Derecho Internacional Público, incluye todas las cuestiones resueltas o pendientes que puedan afectar sus relaciones, sean cercanos o lejanos, limítrofes o no limítrofes, se ubiquen dentro de un mismo hemisferio, o estén muy distantes uno de otro.
La globalización, fenómeno histórico que arrancó en los siglos XV y XVI de la Era Cristiana, tuvo el efecto de acercar a los pueblos y naciones gracias a la ciencia y la tecnología reflejada en el transporte terrestre, marítimo, aéreo e incluso aeroespacial y en todos las nuevas modalidades de la interconectividad virtual. Nunca hemos estado tan cerca unos de otros y al mismo tiempo puede afirmarse lo contrario que seguimos enfrentados. La paz congrega, la guerra separa.
La diplomacia bilateral busca el acercamiento de los países intensificando sus relaciones en todos los aspectos que pueden favorecerlos, si son vecinos a través de la solución de sus diferencias limítrofes mediante la negociación o cualquier otro medio legítimo aceptado por las partes.
De la misma manera en un ámbito de paz, se busca el incremento de sus relaciones comerciales, económicas, financieras, lingüísticas, culturales, religiosas, ideológicas y humanas en toda su vasta interacción. Sin embargo, no podemos ignorar que entre los países existen distintas visiones de poder basadas en la geopolítica, que también buscan asegurar la hegemonía o el predominio de unos sobre otros.
La historia antigua y contemporánea nos muestra el surgimiento, apogeo y caída de los imperios, así como el sometimiento de unos pueblos a otros.
Las guerras han sido los hitos de la evolución de los países, en el siglo XX tuvimos dos conflagraciones mundiales, una larga etapa de rivalidad entre dos grandes potencias, llamada "guerra fría", y muchísimos enfrentamientos de carácter local y hasta continental.
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