Inaceptable
Sorpresa y desconfianza ha causado la noticia del allanamiento por parte de la 12° Fiscalía Provincial Penal Corporativa del Callao a la casa de la periodista María Teresa García, a la sazón editora política del “Diario Expresó”, sobre todo por el halo de misterio que rodeó el operativo sacado de una película de espionaje de James Bond, con participación de más de 40 policías y un fiscal, quien horas después ensayó una respuesta débil al porqué de tal diligencia, sindicando a la propia PNP del número desproporcionado de efectivos, que según dijo él, no pidió, obviando señalar que él es el que dirige la investigación y no vale desentenderse.
Me merece admiración y respeto nuestra Policía Nacional, sin embargo eso no es óbice para que me pronuncie en los casos donde pudiera darse un ejercicio abusivo de sus competencias y éste podría ser el caso, si es que no se sinceran los reales motivos que originaron tamaña intervención a una casa de hogar donde no solo vive la periodista María Teresa García, sino también su señora madre de 90 años y un hermano.
Y decimos que “debe sincerarse” la motivación de una incursión de tal proporción, por la sencilla razón que no sabe bien, no huele bien, no se ve bien, que la casa de una persona que trabaja en un medio de prensa de abierta oposición al Gobierno de turno, se vea invadida de policías y fiscales ¿solo para solicitarle información de un robo al paso acaecido días atrás?, cuando a la vista, hay más de una cámara en la zona que muy bien podía haber proporcionado imágenes del evento.
¿Es esto como se ha dicho, un acto de amedrentamiento contra la periodista o hay la necesidad de conocer de su vida íntima, familiar, personas que la frecuentan, cuántas personas viven con ella, la distribución de los ambientes de su hogar, etc? Todo lo cual constituye un atropello a varios derechos humanos, por lo cual nos súmanos al pedido del Consejo de la Prensa Peruana de que “se transparente la orden judicial que autorizaba el allanamiento y descerraje de la vivienda”.
Si bien en el Perú todos somos iguales ante la Ley, no pretendemos que haya un trato diferenciado hacia una periodista, no, es al revés, ella tiene los mismos derechos como ciudadana a la inviolabilidad del domicilio, a la no perturbación de su vida familiar y a que se le expliquen las motivos por los cuales es requerida por una autoridad, eso es Estado de Derecho.
Si pasamos por alto este evento sin explicaciones reales, sin eventuales sanciones a quienes se hayan excedido, entonces cualquier peruano está en indefensión, bastaría que usted lector(a) tenga cámaras de seguridad en su casa, para que cualquier autoridad allane su casa a la hora y el día que mejor les parezca y eso es INACEPTABLE.