“Hasta cuándo seremos tan cojudos los peruanos”
Nuestro sentido de la moralidad está conectado con la cantidad de engaño con la que nos sentimos cómodos, atrapados en esta jaula mental de indiferencia, apatía y condescendencia ciudadana, el brujo de la tribu nos ha regalado un espejo mágico y éste se está encargando de romper el hechizo y descubrir la verdad dura y cruda y es que cada vez nos parecemos más entre gobernantes y gobernados, lo patético de este casorio a la peruana es que está fecundando hijos cojudignos, una especie registrada como “Made in Perú” y que ya estamos teniendo por millones en el Perú.
La farsa que vive el Perú se ha convertido en el pretexto ad hoc para justificarnos del porque seguimos atrapados en esta baba pervertida, esa que nos hace cada vez más babosos, indiferentes y elásticos con la mentira a pesar que estamos viendo cómo se extingue la verdad para aceptar como algo normal vivir en un país de mentiras e historietas al viejo estilo de Corín Tellado, dicen que el diablo se esconde en los detalles, el allanamiento bamba del Ministerio Público a los inmuebles del lagarto Martín Vizcarra, un auténtico show, un producto falaz como el caimán, los caviares piensan que nos van a enyucar esa bufonada, llegar en la madrugada para ver a un lagarto actoral con los pelos parados, para minutos después lucir bañado, bien peinado y encamisado, exhibiendo su lagarto en el pecho y fingir que se allana circunspectamente ante la presencia de los mandaderos del Ministerio Publico, una diligencia que lleva implícito el tufo caviarón de Gorriti y compañía, un allanamiento previamente calculado y simulado, diseñado para que sea protocolar y creíble y se convierta en una historieta verosímil con el respectivo control de calidad de los contenidos elaborados para la televisión basura y ésta sea consumida por la gente que funciona anestesiada, casi descerebrada e inmune a toda reflexión crítica.
Y por si fuera poco, para que la sinfonía caviar quede completamente afinada fíjese lo que acaba de hacer el servil y rastrero del Fiscal de la Nación Villena ha decidido no investigarlo por genocidio al lagarto Vizcarra, al no considerar sospechosas las reuniones que tuvo este reptil con empresas proveedoras de las pruebas rápidas, este fiscal que termina con las manos manchadas con las muertes de miles de peruanos que murieron injustamente por el COVID ha resuelto pisotear el clamor de los millones de deudos y mi denuncia penal por genocidio que yo Liliana Humala de la Oliva interpuse contra este asesino y corrupto, simplemente este fiscal que tiene enmarrocada su conciencia y que se sabe que la llave la tiene Gorriti, hace lo que su mandamás le ordena, ese es el Ministerio Público sumiso, esclavizado y controlado por la órbita caviar.
Tenemos que reaccionar, frente a todas estas tropelías de los comechados que están en el poder, ellos están viendo por su conveniencia, un Congreso corrompido y velando celosamente por sus beneficios e intereses, como su reelección trucha, si seguimos indiferentes nos convertiremos en una sociedad apática, insana y decadente, si no lo hacemos dejaremos a nuestros hijos un Perú fracturado e irrecuperable, un desastre como sociedad y como país, usted no tiene su conciencia enmarrocada, usted no es un cojudigno, súmese a esta causa que el país de nuestros hijos reclama, ser una nación decente, libre y soberana sobre su destino.
He dicho.
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