En buenas manos
Uno de los personajes clave en la estabilidad macroeconómica del Perú es, sin duda, el Dr. Julio Velarde, presidente del Banco Central de Reserva del Perú (BCRP) quien desde el 2006 viene desempeñando este cargo tan importante y bajo su liderazgo nuestro país ha sido un ejemplo de alcance global en materia de política monetaria. Su visión y compromiso lo han convertido en uno de los economistas más respetados del orbe.
Gracias a la prudencia en la política monetaria del BCRP, hemos mantenido la segunda tasa de inflación promedio anual más baja de la región, solo superada por Panamá. Este logro se enmarca en un contexto global desafiante, donde Perú tiene la tasa de interés más baja de América Latina.
Si bien el crecimiento económico se ralentizó desde el 2014, Velarde y su equipo implementaron estrategias para estimular la recuperación. Este año, las tasas de variación interanual del PBI son mayormente positivas, con proyecciones optimistas impulsadas por la normalización de condiciones climáticas y el avance del gasto privado. Sectores como el agropecuario, la pesca y la manufactura asociada son claves en esta recuperación.
Adicionalmente, el BCRP adoptó decisiones estratégicas para mantener el equilibrio económico. En noviembre último, su Directorio redujo la tasa de interés de referencia en 25 puntos básicos, acercándola al nivel considerado neutral. Este ajuste, en línea con las expectativas de inflación dentro del rango meta, refuerza la estabilidad de precios, un pilar esencial para la confianza de los mercados.
Cabe recordar que el periodo de mayor dinamismo económico en el Perú fue entre el 2005 y el 2013, en el que se alcanzó un crecimiento promedio anual del 6.6%. No obstante, estos últimos años fueron retadores, y a pesar de las crisis internas y externas, la gestión de Velarde permitió que el país conserve fundamentos sólidos para enfrentar diversas adversidades. Las proyecciones para el 2025 consideran un crecimiento sostenido, con una mayor participación de la inversión privada y un rol relevante de la inversión pública en infraestructura.
El liderazgo de Velarde trasciende su rol técnico. Su capacidad para gestionar diversas crisis y proyectar confianza es crucial para consolidar al país como un destino atractivo para las inversiones. La participación del BCRP en decisiones importantes es determinante para la estabilidad del sistema financiero y la fortaleza de nuestra moneda.
Por otro lado, es digno de resaltar la consolidación del Banco Central de Reserva como un modelo de gestión basado en la meritocracia, garantizando la transparencia y la ausencia de corrupción en sus procesos. Esto es un testimonio de que él y su equipo, más allá de su función técnica, también se distinguen por su ética y profesionalismo.
Por ello, nuestro gremio lo invitó el jueves último a brindar una conferencia magistral dirigida a nuestros asociados y a los alumnos de ADEX Escuela –quienes serán los futuros exportadores–, y en una emotiva y cálida ceremonia en la que recordamos con orgullo su participación en el tradicional campanazo de apertura de la Bolsa de Nueva York por los 50 años de fundación del gremio, fue condecorado con la Orden al Mérito Exportador en el grado de Comendador.
Sabemos que ha sido condecorado en muchas oportunidades, pero esta ocasión fue especial. En la medalla entregada figura el logo del BCRP junto con una imagen de su rostro en ella. Quién sabe si sea un presagio para una futura moneda de circulación nacional.
En un mundo donde los cambios económicos son constantes, el Dr. Julio Velarde demuestra que la estabilidad no es un accidente, sino el resultado de decisiones coherentes y liderazgo firme. Su legado es un ejemplo de cómo la economía puede convertirse en un puente hacia el desarrollo sostenible. Con figuras como él, estoy seguro que estamos en buenas manos.
Por Julio Pérez Alván
*Presidente de la Asociación de Exportadores (ADEX)
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