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El humo no se desvanece solo

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Fecha Publicación: 16/02/2024 - 21:30
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El buen desempeño de la Bolsa de Valores de Lima en Nueva York ha sido un éxito sin precedentes para Perú que coincide con el nombramiento de los nuevos ministros. Registró la mayor ganancia de la región desde el jueves pasado, tendencia que persiste en acciones mineras y financieras. El gobierno de Boluarte rompe su maleficio “de equipo ineficiente” al rodearse de figuras competentes, sumando dos perfiles destacados, y junto al Canciller, ya son tres. La expectativa por destrabar megaproyectos mineros en Perú, como Tía María, crece entre los inversionistas tras la promesa de Rómulo Mucho al asumir la cartera de Energía y Minas. José Arista, en el Ministerio de Economía, buscará que el país crezca más del 2.5% del PBI. Ambos, con liderazgo y prestigio suficientes para inyectar confianza, deben construir equipos para gestionar el destrabe de grandes proyectos, combatir la minería ilegal y privatizar Petroperú. Adicionalmente, el gobierno debe otorgar participación permanente a los gremios empresariales en la recién creada Comisión de Destrabe porque representan a los principales afectados por la burocracia, para dar impulso a la inversión privada, obra pública, APPs y otros.

Ningún medio ha destacado el impacto positivo de los nombramientos ministeriales en la Bolsa de Valores de Lima. Por el contrario, algunos sugirieron que eran una distracción de lo manifestado por Villanueva sobre sus coordinaciones con los abogados de Boluarte para excluirla de la investigación de lavado de activos de Perú Libre. La presidenta ni confirmó ni negó, pero solicitó al Ministerio Público que verifique e investigue. Según Ipsos, la aprobación de Boluarte está en 8%. Esta cifra la muestra vulnerable a las crisis, vinculando su imagen a una percepción de falta de transparencia e incompetencia. Además, conecta su investidura con la demolición institucional del Ministerio Público al solicitar su propia investigación.

Todos los fiscales señalados por Villanueva debieron ser investigados y removidos. La justicia peruana ha demostrado su parcialidad y falta de equidad debido a: 1) El uso de acusaciones de crimen organizado para desacreditar y perseguir a opositores políticos. 2) El abuso de allanamientos y prisiones preventivas sin condena ni pruebas suficientes. 3) La cobertura mediática de las acciones legales contra figuras como Alan García ilustran una manipulación perversa.

Es notable cómo los fiscales Vela y Domingo Pérez utilizan medios afines para decirle mentiroso a Villanueva, victimizarse y desacreditar a sus adversarios, tal como lo hizo la exfiscal de la Nación, Benavides. Todo cambia al pontificar a Gorriti, porque los hace parte de la súper propaganda “cometen una injusticia conmigo” ¿disfraz moral o media verdad? La máxima de Goebbels lo explica: “El poder de la propaganda es tal que puede convertir la verdad en mentira y la mentira en verdad”. Pudieron desmentir a Villanueva y allanarse a la investigación, pero optaron por politizarlo todo.

La libertad de Vizcarra es incomprensible. Medio millón de pruebas lo incriminan en el caso “Los intocables de la corrupción”, y sigue impune salpicando esta injusticia al gobierno de Boluarte. La contaminación institucional del Ministerio Público es una amenaza para la débil aprobación presidencial. La solución es firme para la presidenta: 1) Plantear la reforma inmediata del Ministerio Público. 2) Ante ataques de fiscales y periodistas ultrasensibles, considerar la adscripción del Ministerio Público al Poder Judicial, como en Chile y otros países de la región. 3) Enfrentar la resistencia de algunos periodistas y fiscales promoviendo una campaña que inste a actores políticos, sociales y mediáticos a adoptar compromisos éticos institucionales con la verdad, integridad, transparencia, rendición de cuentas sobre su financiamiento y posibles conflictos de interés.

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