Economía regenerativa y el bienestar social
Diversos emprendimientos en el mundo suman esfuerzos para reducir el impacto ambiental negativo de los procesos de transformación, por medio de la economía regenerativa, que significa gestionar sostenible y equilibradamente el bienestar humano y reducir los riesgos para el medio ambiente.
Desde el 2013, estas iniciativas son reconocidas por Premios Latinoamérica Verde, creado en Ecuador y que desde entonces difunde acciones para cambiar aspectos en lo ambiental, social y económico. En abril, Premios Verdes reconocerá a las iniciativas más destacadas en sostenibilidad y cuidado del medio ambiente. Estos casos al igual que 20,756 proyectos ambientales de 1,159 ciudades de 53 países, que son parte del movimiento, tienen un rol clave para lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Al respecto, el Perú cuenta con proyectos que aplican la economía regenerativa buscando que el impacto ambiental sea menor y se den condiciones justas a sus colaboradores, estos son el Humedal Pucush Uclo Ojo del mundo, Perú Por naturaleza, Purpuralab laboratorio textil sostenible y Paleo Park de Piura, que tienen en común dar soluciones efectivas para afrontar el cambio climático y la degradación ambiental y que son finalistas en Premios Verdes.
El concepto de economía regenerativa (ER) creada por Bill Reed nació en 2006 y luego fue desarrollado por Daniel Wahl (Designing Regenerative Culture) y se llama así porque integra la economía circular, social y la relación de las personas con el entorno, dando paso a una cultura regenerativa que crea valor. Hoy en día, las empresas se autodenominan verdes, porque además de generar utilidades, reducen su impacto ambiental y conservan los recursos naturales de forma sostenible. Se agrega que estas empresas son equitativas y procuran bienestar social en todos sus niveles.
Existen proyectos que aplican la ER en diversos campos, como la construcción donde se edifican conjuntos habitacionales sostenibles integrados a su entorno natural y regenerando, a través de prácticas sostenibles, el uso de materiales naturales logrando mayor eficiencia energética y una menor huella de carbono. Este nuevo sistema garantizaría el cuidado de la vida en el planeta. Y como observan algunos investigadores en el campo de la ganadería se daría un cambio económico en el sistema regenerativo con la baja en los costos.
Bianca Dager, CO-CEO de Premios Verdes, indicó que América Latina vive una transición ecológica para cambiar el modelo económico extractivo-degenerativo, por un modelo de economía circular-regenerativa sincronizada con los ciclos naturales del planeta y capaz de generar impactos positivos que van más allá de la sostenibilidad, a medio y largo plazo, para devolverle el equilibrio ecológico.