Día de miércoles
Hay días en el calendario que, por una u otra razón, han originado dichos populares, no solo de fácil recordación, sino de general entendimiento. Uno de ellos es “salió con su domingo siete”, referido al obcecado que, pese a no tener razón, por cansancio se le permitió su deseo. Otro es “Cuidado con el martes 13, ni te cases ni te embarques”.
Algunos también se refieren al miércoles, insinuando que es día negro, negativo, peligroso o indeseado, lo que se expresa con la denominación de “Día de miércoles”, que parecería ser lo que piensa muchísima gente de este pasado miércoles 3 de septiembre.
En el miércoles de esta semana ocurrieron varios hechos que mortificaron a la población, como son: la insistencia de la presidenta de la República y algunos ministros en construir el penal de “El Frontón”, a sabiendas de que es más oneroso que cualquier otro de sus mismas dimensiones y características, que por ser más gravoso al erario nacional ya había sido desechado en este régimen presidencial y por las mismas personas, que como si antes hubiesen denostado de Judas Iscariote ahora pretenden prenderle velitas misioneras.
También el mismo miércoles, un Tribunal Superior, resolviendo la apelación de Martín Vizcarra de la resolución de primera instancia que ordenó su detención preventiva por presumiblemente no tener ni arraigo familiar ni laboral, revocó la medida al considerar que existen ambos arraigos, pues domicilia con parientes y presta servicios en empresa familiar. Estamos en un sistema jurídico de doble instancia y en diversidad de ocasiones la instancia superior revoca lo dispuesto por la inferior. No se ha resuelto el tema de si es o no culpable de los delitos que se le imputan y sería casi imposible que su sentencia sea absolutoria. Más que probable es que, cuando se expida la sentencia, será condenatoria y no benévola, pues se han probado las imputaciones que se le han hecho.
En el caso de la señora Betssy Chávez, que fuese presidenta del Consejo de Ministros en el (des)gobierno de Pedro Castillo, el Tribunal Constitucional, en un exceso de formalismo —aunque el Derecho es formal per se—, ha ordenado el levantamiento de su detención preventiva. Pero el procedimiento penal continúa y tiene para un buen tiempo y, como en el caso anterior, es más que claro que ella ayudó a Pedro Castillo en su golpe de Estado. Sería inaudito que él lo hiciese solo, pues si no podía organizar dos frases, menos podría haber redactado su manifiesto golpista, en el que se sospecha de la intervención de la señora Chávez y de Aníbal Torres. Más que seguro que, dentro de un tiempo, no se denostará de su libertad, sino que habrá aplausos por su condena.
A un partido político que pretendía participar en las próximas elecciones generales, el Jurado Nacional de Elecciones le negó su inscripción, por lo que desde la partida quedó fuera de la contienda. El Poder Judicial, metiendo su cuchara en lo que no debe, ha rebatido a la autoridad electoral, con olvido de que las decisiones de esta última son inamovibles por los propios céleres tiempos de los procesos electorales. Esperemos que el JNE tenga el suficiente criterio y fortaleza para mantener incólumes sus decisiones.
Entre tantos temas que incordian a la ciudadanía, por más jurídicos que puedan serlo, por lo menos hubo una noticia halagüeña: la condena a Alejandro Toledo por el caso Ecoteva. Si no tenía patrimonio para adquirir una lujosa residencia en Las Casuarinas y una importante oficina en uno de los mejores barrios limeños, le es aplicable, además de la condena, la certeza del dicho: “Sacristán que no tiene cerería, ¿de dónde pecata mea sino es de la sacristía?”.
Mira más contenidos en Facebook, X, Instagram, LinkedIn, YouTube, TikTok y en nuestros canales de difusión de WhatsApp y de Telegram para recibir las noticias del momento.