Devolución del Fonavi al 2022
El Fondo Nacional de Vivienda (Fonavi) fue creado por el Decreto Ley N° 22591, en junio de 1979 (al final del gobierno militar), como una contribución obligatoria del salario. Tenía por fin construir viviendas para los trabajadores en función a sus ingresos. Estuvo vigente casi 20 años (hasta agosto de 1998). Fue implementada como una contribución, no como un impuesto, y por lo tanto sujeta a una contraprestación por parte del Estado.
La finalidad del Fonavi fue desnaturalizada por las administraciones de los gobiernos de Belaunde, Alan García y Fujimori, quienes utilizaron los fondos para obras públicas.
En 1998 el gobierno de Alberto Fujimori le cambió de nombre, y de contribución pasó a ser un Impuesto Extraordinario de Solidaridad. Sin embargo, en 2004, ese impuesto fue derogado.
En septiembre de 2007 una sentencia del Tribunal Constitucional (TC) señaló que el Fonavi no fue un tributo; lo cual reiteró en otra sentencia de enero de 2008. Esto significa que los Fondos del Fonavi son recursos privados, por lo que no pueden formar parte del presupuesto del Sector Público, y su devolución no implica gasto público. Si el Estado los usó para obras públicas, entonces constituye un endeudamiento público interno.
El Fondo llegó a acumular unos 30,200 millones de soles. En el 2008 se creó una comisión para iniciar la devolución de los aportes, pero se detectó que unos 10 mil millones de soles se habían esfumado o se había invertido mal. Ahí comenzaron los problemas en torno al reconocimiento de la deuda y del cumplimiento de la Ley y su interpretación.
Esto motivó que el 2010, mediante referéndum, se aprobara la Ley N° 29625, ley de devolución de aportes al Fonavi que indica: (1) devolución del total aportado (actualizado con tasa de interés legal efectiva) y; (2) crea una Comisión Ad Hoc para efectuar la devolución y administrar y recuperar recursos.
En noviembre de 2012, una sentencia del TC interpretó la Ley 29625, aclarando que procede la devolución individual (aporte del trabajador) y la devolución colectiva (aportes de empleadores).
La comisión ad-hoc, creada por la Ley 29625, estimó en 1,253 millones de soles el monto por devolver a los aportantes a partir del 2015. Desde entonces hasta el 2019, el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) dispuso la devolución de montos mínimos, contraviniendo la ley, devolviendo S/ 10 por cada aporte mensual acreditado, en lugar de los 300 soles por mes si se aplicaba la tasa de interés legal promedio del periodo (5%). Entre los años 2015 y 2019 solo se devolvieron 1,346 millones de soles entre un millón de exfonavistas.
En abril de 2021, el Congreso de la República dio la Ley 31173 para garantizar el cumplimiento de la Ley 29625, priorizando a la población vulnerable, como consecuencia de la pandemia de la covid-19. El gobierno de Sagasti presentó una demanda de inconstitucionalidad ante el TC en mayo (aún en proceso), y luego, en julio de 2021, observó la ley.
El 12 de enero de 2022, basándose en una sentencia del TC de 2014, que versa sobre la actualización del pago del Fonavi a empleados y empleadores, el pleno del Congreso retomó el tema y aprobó el dictamen que garantiza el cumplimiento de la ley que permite la devolución de dinero a sus aportantes.
Según los estimados del MEF se tendría que pagar a 2 millones de exfonavistas un monto total de 42,000 millones de soles. El Tribunal Constitucional no ha dictado lineamientos sobre los montos a devolver a los fonavistas. Sin embargo, la Federación de Fonavistas ha señalado que a cada aportante se le debería devolver en promedio S/ 15,000.
Hoy, la mayor parte de los aportantes al Fonavi deben formar parte de la población vulnerable o en retiro, y necesitan ingresos para sobrevivir. Es responsabilidad del Estado generar mecanismos de corto y mediano plazo que aseguren la devolución, para que no siga el destino de los bonos de la Reforma Agraria.
Mira más contenidos siguiéndonos en Facebook, Twitter e Instagram, y únete a nuestro grupo de Telegram para recibir las noticias del momento.
