Delincuente el actual Congreso del Perú
Desde septiembre 2022: 1) José Williams usurpa su presidencia ; 2) 68 congresistas (mayoría) lo eligieron y 3) 62 (minoría) lo consintieron.
Directiva congresal: presidente y 3 vicepresidentes, plazo 1 año: de julio 27 a julio 27 del siguiente año.
El caso es que el 6 de septiembre 2022, depuesta la presidenta del Congreso Camones, no le sucede su vicepresidenta Moyano. Eligieron a Williams, conviniéndose que los 3 vicepresidentes de Camones continúen como vicepresidentes de Williams.
En efecto, el 7 de diciembre último, mientras el Congreso espurio está procediendo a la suspensión por 5 años del Presidente de la República, paralelamente desde Palacio de Gobierno, el Presidente está dando lectura al Decreto de Urgencia de disolución del Congreso y receso de los demás poderes del Estado.
En la ceremonia de disolución, debía estar sentado a la derecha del Presidente el Comandante en Jefe del Ejército, general Walter Córdova, y a su izquierda el ministro de Defensa, general Bobbio; pero a los instantes de empezar la lectura, el Presidente se da cuenta de que los dos generales se habían esfumado. Se observó la alteración pública del Presidente (empezó a temblar), recién se dio cuenta de la traición de los generales.
En el Congreso hubo una conmoción, exigiendo se vote la vacancia por incapacidad moral. Así fue y hubo 101 votos. Verificado esto, Williams se colocó la banda presidencial y el primero en reconocerlo y felicitarlo fue el general Gómez de la Torre, presidente del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas. El Presidente Castillo salió para asilarse en la Embajada de México; situación en la que Williams y el general Gómez de la Torre dispusieron su detención.
Del 7 de diciembre al 9 de enero últimos, en enfrentamientos graves hubo como 50 muertos y 1,300 heridos entre civiles, soldados y policías en el amotinamiento del país: cortes de carreteras, tentativas de toma de aeropuertos, etc.
Los informes de las instituciones supranacionales subrayan que en los enfrentamientos hubo graves infracciones de derechos humanos: probable ejecución extrajudicial, torturas, etc. Estas entidades exigen investigación leal y sanción. Esta exigencia ineludible es el problema fundamental de los próximos meses.
Un Congreso espurio y un Ejecutivo funcionando a medias, convierten al Perú en un Estado de Derecho en aberración. Aberración que no puede durar mucho y que debe estar definiéndose el próximo mes de julio en que termina el periodo del espurio presidente del Congreso.
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