¿Cómo es la Navidad en el Perú?
La celebración de la Navidad en Perú es una ocasión especial que combina tradiciones culturales, costumbres locales y la influencia de la celebración cristiana.
Las calles, casas, tiendas se decoran con luces, guirnaldas y árboles de Navidad, se escucha música navideña, incluyendo villancicos tradicionales y canciones populares, que es una parte integral de la celebración.
Es una tradición en la cultura peruana la asistencia a la Misa del Gallo en la noche del 24 de diciembre, las familias (y me incluyo) suelen ir a la iglesia para participar en la misa que conmemora el nacimiento de Jesús.
En la noche la Cena de Nochebuena es una celebración festiva en la que las familias peruanas se reúnen para compartir una comida especial. Los platos típicos varían según regiones, pero lo más común son el pavo, que en este año se venderán 1’620,000 solo en diciembre, los tamales y el lechón.
Es usual que después de la cena se realice entre la familia y amigos el intercambio de regalos, o se le entregue regalos a los más pequeños de la casa.
En algunas ciudades y comunidades, se celebran espectáculos de fuegos artificiales para marcar la llegada de la Navidad, en otras se realizan danzas tradicionales y representaciones teatrales para celebrarla.
Es común que se realicen celebraciones navideñas comunitarias que incluyen actividades para niños, presentaciones artísticas y la participación de grupos locales.
Entre las principales danzas navideñas de Perú están las Pallitas que lo bailan mujeres que zapatean y cantan al son de una guitarra y el Hatajo de los Negritos que lo bailan varones zapateando al son de un violín y de campanillas, ambas oriundas de Ica son representaciones bíblicas de la visita de los pastores al Niño Jesús y de la llegada de los Reyes Magos.
Otra de las celebraciones regionales es la danza de los Negritos de Huánuco, que se desarrolla desde el 24 diciembre hasta la pascua de reyes, tiempo en el que, durante la colonia, los esclavos llegados del África para trabajar en las haciendas huanuqueñas, tenían licencia para poder bailar y adorar al niño Jesús.
En el Cusco tenemos el Santurantikuy, que significa ‘la venta de los santos’, donde los artesanos de las regiones se reúnen en la Plaza de Armas para exhibir sus creaciones, teniendo como la más representativa al “niño Manuelito”, que es una representación del niño Jesús.
Sea como sea su celebración, la Navidad nos invita a enfocarnos en lo positivo y encontrar la belleza en las pequeñas cosas. Que esta festividad los envuelva con afecto y gratitud, le traiga esperanza, momentos de conexión con sus seres queridos, risas contagiosas y recuerdos que atesorar. Feliz Navidad.
@sandrostapleton
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