Chilla caviar por suspensión de aportes millonarios de USAID
Los caviares han estallado en lágrimas luego de que el Gobierno del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunciara la suspensión de millonarias inyecciones de dinero a las ONG y medios progres, como El Comercio, RPP, La República, Ojo Público, Transparencia, Epicentro, La Encerrona, IEP, entre otros, a través de la Agencia de EE. UU. para el Desarrollo Internacional (USAID).
Y todo indica que estas lágrimas van a continuar inundando las redes sociales, porque, inclusive, Elon Musk ha señalado que Trump tiene la intención de clausurar, de manera definitiva, la USAID, la cual, a consideración del magnate, “ha sido dirigida por un puñado de lunáticos radicales”.
Era de esperarse esta decisión, pues el pueblo estadounidense, en su mayoría, eligió a Donald Trump para que el Ejecutivo no siga despilfarrando el dinero de los contribuyentes norteamericanos en asuntos que no favorecen a su país. Por algo venció el “America First” (Estados Unidos primero).
Y es que era totalmente inaudito que Estados Unidos, la tierra del capitalismo, patrocinara a ONG y medios que promueven ideologías colectivistas que solo traen más pobreza y, por lo tanto, más migrantes ilegales hacia EE. UU.
Al unísono, los caviares nacionales han escupido sus críticas hacia el periodista Paolo Benza, cuyo único “delito” fue poner al descubierto un monto de financiación de más de 2 millones de dólares por un proyecto de junio de 2021 a diciembre de 2023, en donde resultaron beneficiadas las organizaciones y medios presuntamente independientes descritos líneas arriba.
En vez de matar al mensajero, estos rojos de cafetín deberían preocuparse, más bien, en generar sus propios ingresos y no depender de subvenciones extranjeras, que, por cierto, no son fiscalizadas, ya que el Parlamento aún no aprueba la norma que permitirá revisar los dineros que reciben las ONG del exterior.
Pasando a otro tema, en una reciente entrevista con este medio, que puede usted revisar en la cuenta de YouTube y Facebook de EXPRESO, el cómico Carlos Álvarez demostró por qué aparece con 4 % de intención de voto en la más reciente encuesta de Ipsos, empatando nada menos que con el alcalde de Lima y líder de Renovación Popular, Rafael López Aliaga.
Álvarez no teme decir abiertamente que, de llegar a ser presidente, los delincuentes tendrán que trabajar para comer en la cárcel, dado que le importan un “carajo” los derechos humanos de estos desechos. Para ello, dijo el artista cómico, una de sus primeras medidas sería que el Perú renuncie al Pacto de San José, saliéndonos así del ideologizado Sistema Interamericano de Derechos Humanos.
Ante la ola de criminalidad que azota la región, el tema fundamental que deben abordar los eventuales postulantes a la Presidencia en 2026 es cómo harán para acabar con esta lacra. Por ahora, el único que enarbola la bandera de la lucha contra la inseguridad ciudadana es el imitador, a quien no se le debería subestimar de ninguna forma.
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