¡Campañas con plata del Estado son fraude anticipado!

¡INDIGNACIÓN!
Esa es la palabra que resume lo que sentimos millones de peruanos al ver cómo expresidentes sentenciados por corrupción siguen recibiendo sueldos, combustible, seguridad, chofer, secretaria y otros privilegios como si fueran héroes de la patria. ¿En qué clase de país vivimos que honra con gollerías a quienes traicionaron la confianza del pueblo?
No podemos seguir tolerando esta majadería institucionalizada. Un funcionario público que ha sido sentenciado por corrupción, malversación de fondos, peculado u otros delitos cometidos en el ejercicio de su cargo en agravio del Estado no debe recibir absolutamente nada. ¡Ni un sol más del bolsillo del pueblo!
Y peor aún: los ciudadanos que aportamos con nuestros impuestos terminamos pagando abogados que defienden a estos sinvergüenzas. ¡Esto es una afrenta! Es el colmo de la cobardía política y la complicidad sistémica. Si un exmandatario es acusado de haberse enriquecido usando el poder para delinquir, ¡que se defienda solo, como cualquier delincuente común!
¡No más privilegios, no más pensiones vitalicias, no más camionetas blindadas ni gasolina gratis para quienes vaciaron las arcas del Estado!
Robaron educación, salud, oportunidades y futuro. Y todavía pretenden seguir cobrando.
Desde nuestra trinchera, propondremos un proyecto de ley firme y sin contemplaciones: una vez que la sentencia por delitos contra la administración pública sea consentida y ejecutoriada, el condenado pierde de inmediato todo beneficio vinculado a su cargo. Esto aplica a expresidentes, ministros, congresistas, gobernadores regionales, alcaldes y cualquier funcionario que haya usado su posición para delinquir.
¡SE ACABÓ LA IMPUNIDAD DORADA!
Y que quede claro: en casos de corrupción y agravio al Estado, el Perú no debe sufragar ni un sol en defensa legal de los acusados. Quien usó el poder para robarle al pueblo, que enfrente la justicia como lo que es: ¡UN TRAIDOR A LA PATRIA!
¡Y ahora, para colmo, se roban hasta la campaña!
Como si no bastara con el cinismo de los corruptos condenados que seguimos manteniendo, ahora los congresistas sinvergüenzas han aprobado el uso de la “plata de representación” —dinero público— para financiar su campaña personal.
Es decir, los peruanos les pagamos la campaña, mientras el resto de candidatos tiene que gastar de su propio bolsillo.
Esto es una burla descarada al proceso democrático. Es una competencia desleal, tramposa y vergonzosa; es un abuso y una amenaza directa a la democracia.
¿Dónde está el presidente del JNE? ¿Dónde está el principio de equidad electoral e igualdad entre candidatos?
Hago un llamado urgente y firme al presidente del JNE para que se pronuncie de inmediato. Las elecciones deben garantizar igualdad de condiciones, no ventajas compradas con el dinero del pueblo.
¡PRONÚNCIATE YA!
Las elecciones de 2026 no pueden estar marcadas por el abuso de poder ni por el uso inmoral de los recursos del pueblo. Quien usa recursos públicos para financiar su campaña, está cometiendo un fraude anticipado.
Quien roba desde el poder y luego se quiere blindar con abogados pagados por todos, no merece otra cosa que el peso total de la justicia.
“Al corrupto no se le premia, se le castiga. Y al traidor no se le protege, se le desnuda ante la justicia y se le borra del privilegio.”
“Y al político que usa dinero del Estado para su campaña, se le debe llamar por su nombre: ventajero, tramposo y enemigo de la democracia.”
He dicho.

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