¿Calienta Quero para el premiarato?

Si bien no existe norma que obligue a la jefa del Estado a efectuar cambios ministeriales en los meses de julio y diciembre, en ocasión de las Fiestas Patrias y cierre de año, respectivamente, esto sin embargo se estila hacer por tradición, el refrescar el gabinete, que sirve para oxigenar al Ejecutivo.

Esta vez, estando ya en el preludio de nuestras fiestas nacionales, no ha trascendido ni filtrado que fuera a renovarse a los titulares de las carteras, lo que en mi opinión, no significa que en corto tiempo no vaya a ocurrir, porque va cobrando fuerza en la percepción de la clase política, los medios de comunicación y la ciudadanía, que el actual ministro de Educación Morgan Quero asumiría la presidencia del Consejo de Ministros, tomando el lugar de Gustavo Adrianzen, quien muy bien podría permanecer como ha sucedido en otros casos, de asesor presidencial o asumir alguna embajada o un alto cargo de representación del Perú en el Exterior, ya que no se vería elegante que un premier en ejercicio deje el cargo para asumir a renglón siguiente, de forma inmediata, el de un ministerio, rango jerárquicamente inferior al que tuvo.

En el imaginario de la opinión pública, en la práctica el señor Quero pareciera ser el premier, es el ministro omnipresente en cuanta actividad pública del Ejecutivo, se le aprecia en ceremonias junto a integrantes del cuerpo diplomático extranjero acreditado en el Perú y hasta que dio sus aborrecibles declaraciones asumidas como justificación a la violencia sexual contra las niñas y adolescentes de las comunidades nativas (lo que debió costarle el cargo), fungía, reitero en mi opinión, de vocero político de la jefa del Estado y del gobierno, actuaba de bombero corriendo a apagar fuegos en las continuas crisis políticas que la propia administración se autogeneraba, papel que le es propio desempeñar más bien al primer ministro y bien sabemos que en política, el espacio que se deja libre, otro(s) lo llena(n).

Ahora bien, de darse el caso, ¿merece ser ascendido a premier Quero? Estimo que no, aquello de que las violaciones de las escolares de nuestra Amazonía por parte de sus maestros, es una práctica cultural para ejercer una forma de construcción familiar, lo descalificó como ministro y servidor del Estado; ese es mi sentir y de la mayoría de peruanos.

La presidenta está resuelta a no renunciar hasta el 28 de julio del 2026, sin embargo debiera tener algún gesto de sintonía, de cable a tierra con la población, que muestra una cuasi unanimidad por la salida de los ministros de Educación y Mujer, así como el de Salud, MTC, Comercio Exterior (la propuesta de venta de carne de burro a China es de lo más surrealista), entre otros. Pero ¡oh paradoja!, de los sectores citados, el que pareciera inamovible y la niña de los ojos de la jefa del Estado, es precisamente el de Educación, que podría ser premiado con el fajín de PCM. ¿Serrucho a la vista? ¡Aguzado Adrianzén!

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