CADE Ejecutivo 2024: ¿Nuevos aires?

(Arequipa).- Aterrizo en la ciudad blanca. Nos recibe un hermoso sol y una vista privilegiada del volcán Misti. La Conferencia Anual de Ejecutivos regresa a Arequipa. Me encuentro con amigos en el avión. Viajo con el expresidente colombiano Álvaro Uribe, quien disertará sobre “Liderazgo de acción en el actual contexto geopolítico y geoeconómico mundial”.
Al recibir la bienvenida a esta 62ª edición de CADE Ejecutivos 2024, llamó poderosamente mi atención el párrafo inicial que afirma: “Este se realizará en medio de una coyuntura de estancamiento económico y degradación generalizada en el país, producto del debilitamiento institucional, la politización de la agenda pública, y la falta de capacidad del Estado para impulsar inversión privada, políticas públicas y servicios de calidad necesarios para el progreso de la ciudadanía y el desarrollo de las regiones”.
Esta percepción empresarial sobre una situación casi catastrófica de la economía no corresponde a lo que vemos a diario en las calles de Lima o las principales ciudades del país. No vemos un país incendiado, ni instituciones públicas que renuncien al ejercicio del poder. Podemos discrepar de las decisiones que toman los gobernantes porque no favorecen al sector formal de la economía, pero eso no significa que la dinámica social y económica en su totalidad se detenga. Eso no está ocurriendo. Si queremos impulsar cambios reales para que las empresas y la economía tengan un rumbo distinto y mejor, deberíamos partir por no vendernos simulacros, sino diagnósticos reales de lo que viene ocurriendo en el país.
Reitero cuatro procesos que vive la sociedad peruana en una visión de largo plazo.
Desborde Regional y Crisis de Estado: Las regiones tomaron la iniciativa política y ponen en jaque al centralismo limeño. Gobierno Central y Congreso responden a una agenda distinta, forzando a la gestión pública a ponerse en modo “regiones”.
Fin de un ciclo tecnocrático y comienzo de un ciclo político: Representados en la caída de PPK y la subida de Vizcarra. El nuevo ciclo político durará 10 o 15 años por lo menos, y será necesario formar una nueva tecnocracia que administre racionalmente el pacto conservador entre izquierdas radicales y derechas mercantilistas.
Cambio generacional: Cada 25 o 30 años, peruanos de 40 y 50 años desplazan a los de 60 y 70 años. Estos últimos se resisten a dejar su posición de dominio, pero la muerte o el retiro forzado se encargarán de hacer realidad un hecho natural.
Hegemonía de la informalidad-ilegalidad sobre la formalidad no inclusiva: Este enfrentamiento no suma a la construcción del país. El reto es reconvertir el concepto de formalidad e incluir al sector informal en una nueva formalidad, donde juntos enfrenten el avance incontenible de los ilegales.
No hay sociedad que garantice un desarrollo sostenible si no combina exitosamente, y en un círculo virtuoso, Crecimiento Económico (Generación de Riqueza) e Inclusión Social (Distribución equitativa de la riqueza). Sin estos pilares en equilibrio, hablar de futuro no tiene mayor sentido.

Mira más contenidos siguiéndonos en Facebook, X, Instagram, TikTok y únete a nuestro grupo de Telegram para recibir las noticias del momento.