Biorremediación para mejorar las playas
Hace más de un año diversas playas fueron afectadas por el derrame de petróleo y hasta la fecha, muchas de ellas aún no se pueden recuperar. En el mundo, estos lamentables sucesos son tratados por medio de la biorremediación, técnica que usa organismos vivos para eliminar los contaminantes y toxinas del suelo y el agua, producidos por derrames de petróleo o agua subterránea contaminada.
Los expertos aseguran que cuando se aplican estas técnicas estimulan a los microorganismos nativos que existen en el medio ambiente. También, la bioaumentación, que incluye células vivas, acelera la degradación de determinados contaminantes.
La biorremediación tiene diversas ventajas si se le compara con otras alternativas de remediación, pues es un método considerado verde porque su impacto es menor en los ecosistemas. Al utilizar bacterias, hongos y plantas produce pocos subproductos dañinos y sus costos son algo bajo en comparación de los métodos de limpieza, pues no requiere del uso de muchos equipos.
De esta manera, existen microbios que pueden degradar el petróleo, hidrocarburos e insecticidas. Metales pesados como el mercurio, que no es biodegradable, las bacterias los concentran de tal forma que los aíslan fácilmente.
Diversos países usan bacterias en la biorremediación para restaurar la calidad del medio ambiente, incluso para degradar el petróleo. Un ejemplo de este desarrollo son las bacterias modificadas como biosensores para detectar contaminantes, lo cual se emplea en Argentina, según ArgenBio.
En México se aplican diversas tecnologías para restaurar suelos contaminados con hidrocarburos, así como rescatar agua por medio de materiales orgánicos, como el grano verde de café de baja calidad. Así fue que se restauraron 15 mil toneladas de suelo contaminado con hidrocarburos del Parque Bicentenario en el 2020. Sin embargo, otros investigadores señalaron que puede llevar años para completar la restauración y recuperación de las áreas impactadas, dependiendo, entre otros factores, de la cantidad de contaminante y de condiciones ambientales que favorezcan la proliferación y actividad de los organismos que se usen.
En cuanto a costos, aplicar este método en fase sólida o de lodos, según autores, puede durar semanas como meses y sus costos oscilan entre 130 y 260 dólares por m3.
En el Perú existen interesantes experiencias como la recuperación de la calidad del agua del río Negro en Recuay (Áncash), también se aplicó en aguas ácidas de minas peruanas, así como se realizó una prueba piloto en el Lago Titicaca y el río Katari con el fin de eliminar los contaminantes.
Ya es momento de actuar y recuperar el litoral costero afectado, las autoridades encargadas así como los responsables del daño deben responder adecuadamente ante un problema ambiental que afecta a todos los peruanos.
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