Ahora en París

Michel de Yugoslavia expone en París para lanzar una nueva temporada que espera sea tan prolífica como la anterior con fotografías que en el 2022 revelaron su singular condición de príncipe, artista y diplomático. En la galería de arte de Euni Ahn, su agente en Asia, siempre con la curaduría de Gilles Bastianelli con quien ha enlazado su presencia en ferias de arte, festivales y exposiciones en Corea, Singapur, Portugal están ahora en París con fotografías de los restos arqueológicos de AlUla y sus paisajes con escudos dorados.

AlUla es un oasis en medio del desierto de Arabia Saudita, pero sobre todo es un extraordinario yacimiento arqueológico pre islámico, hasta ahora desconocido por motivos religiosos. Desde la antigüedad AlUla ha sido el punto de encuentro de diferentes civilizaciones en una ruta comercial entre la península arábiga, el mundo mediterráneo y Asia. Los restos dan testimonio de intercambios culturales fundamentales. Las recientemente descubiertas ruinas de Dadan se mencionan tres veces en la Biblia. AlUla es un patrimonio arqueológico que con el gran proyecto auspiciado por el Príncipe Heredero Mohamad de Arabia Saudita, ahora se revela y comparte con el mundo.

Las fotos en gran formato de AlUla, exhibidas por primera vez en la arquitectura neo futurista del Dongdaemun Design Plaza, DDP, importante símbolo del desarrollo urbano de Seul con ocho millones de visitantes al año, fueron como un regalo de Michel de Yugoslavia al mostrar la cultura de Arabia poco representada y conocida en Corea, cuarto socio comercial de Arabia Saudita después de China, Estados Unidos y Japón. Curiosamente Corea con el K-pop y las series de televisión brilla en Arabia.

En septiembre del año pasado en Kiaf/Frieze Seoul, la feria de arte contemporáneo más grande de Asia, con gran éxito se exhibieron sus paisajes con escudos de armas dorados. Resaltaron dos obras tomadas en Serbia, una de ellas dedicada a la iglesia de san Jorge ornamentada con el águila bicéfala dorada símbolo de la unión de Oriente y Occidente. Considerando el oro un símbolo de riqueza que también se asocia a la espiritualidad.

“Expresar con certeza, prometer con fuerza que algo es verdad, que algo existe” dice Michel de Yugoslavia, para concluir esta crónica.