Aberraciones jurídicas

Ninguna sentencia penal tiene efectos jurídicos si no ha sido confirmada por otra de segunda instancia, y aún ésta no tiene efectos si ha sido impugnada vía recurso de nulidad o de casación, esto se deriva del principio de la doble instancia y en que las sentencias judiciales sólo se ejecutan y/o tienen efectos jurídicos en tanto han quedado consentidas y ejecutoriadas, más aún en el Derecho Penal, en que una prueba descubierta a  último minuto puede justificar la nulidad de la sentencia condenatoria y la posterior absolución del condenado, sagrados principios de garantía de la administración de justicia penal, vigentes en el Derecho Penal Comparado.

Sin embargo, las “reformas políticas” del Gobierno han exigido al Congreso  impedir la postulación de un candidato sólo si tiene sentencia condenatoria de primera instancia, lo cual es una aberración jurídica, que contraría los principios y garantías antes expuestos, pero además abre una peligrosa puerta de impedimento a la postulación de cualquier candidato que resulte peligroso al Gobierno Mundial y a sus títeres nacionales, planteándole una denuncia falsa, como ya lo vienen haciendo con sus opositores, y logrando una sentencia condenatoria por delitos que nunca cometió, por la presión del poder político detrás de la Junta Nacional de Justicia.

Es inaceptable que el Congreso esté aprobando estas barbaridades inconstitucionales violatorias de los derechos civiles y políticos de todos los peruanos.

Ninguna ley puede extender los efectos jurídicos de una sentencia que no ha quedado consentida, vulnerando lo que la Constitución establece.

Una ley que nace muerta ha sido aprobada en el Congreso por la presión de Vizcarra, que amenaza con cerrarlo si no le aprueban sus aberraciones jurídicas; algo muy grave sucede en la nación, se ha perdido la cordura intelectual, pero aún más grave es que se ha perdido la cordura moral, lo que ha hecho posible que una banda de soberbios reformistas sociales financiados por sumas millonarias por un gobierno extranjero, haya tomado por asalto a punta de amenazas y falacias jurídicas inconstitucionales, el control político de la nación y esté montando una dictadura, con el sometimiento abdicador del Congreso.

El Ejecutivo insiste en quitar el levantamiento de la inmunidad parlamentaria al Congreso para dárselo al Judicial que ya controla, este es el verdadero motivo de la reforma política de Vizcarra, para cumplir con su traidor compromiso de montar una dictadura al servicio del Gobierno Mundial.