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¡Abajo el neoterrorismo!
En los últimos días hemos sido testigos de condenables actos terroristas tras el golpe de Estado fallido de Pedro Castillo y la asunción constitucional de Dina Boluarte a la Presidencia. Estas violentas movilizaciones pretenden restituir y liberar al vacado Castillo, quien se encuentra bajo prisión preventiva por haber quebrado el orden constitucional.
La protesta pacífica es un derecho, pero, en este caso, estamos frente a neoterroristas que no tienen reparo alguno en tomar aeropuertos, bloquear carreteras o incendiar sedes de instituciones estatales, forrados hasta los dientes con armas hechizas. Producto de estos disturbios, tres niños han fallecido por no poder recibir atención médica, según informó el Ministerio de Salud.
Que se apaguen estas vidas inocentes sí es penoso, mas no que forajidos caigan por cometer delitos en pleno estado de emergencia a nivel nacional. Esta medida -muy bien dictada por el Gobierno de Boluarte- permite que las Fuerzas Armadas apoyen a la Policía Nacional en el restablecimiento del orden público. Si estos “ciudadanos” quieren evitar salir heridos o hasta morir, pues que dejen de delinquir. Las FF.AA. y la PNP solo actúan conforme a la ley y una acción subversiva trae, por supuesto, consecuencias.
Lo que estamos viviendo es producto de haberle abierto las puertas en elecciones democráticas del Ejecutivo y Legislativo a senderoides, movadefos y demás peste. No hay que olvidar tampoco que el caviar Avelino Guillén es uno de los principales responsables de este desmadre, porque, cuando fue ministro del Interior, permitió que Castillo nombre como prefectos y subprefectos a comprobados filoterroristas.
La huelga criminal, según los comunistas del Parlamento, clama por la instalación de una Asamblea Constituyente para la redacción de una nueva Carta Magna. No obstante, estos revoltosos ni siquiera han leído la Constitución. ¡Su único interés es incendiar el país! Adelantar las elecciones generales para el año 2023, por tanto, no hará que el caos acabe. La paz, lamentablemente, llegará recién cuando se desplome el último neoterrorista.
A pesar de la grita roja, Dina Boluarte no puede renunciar a la Presidencia. Eso sería una muestra terrible de debilidad que haría que estos vándalos avancen. Los comicios deben adelantarse, de eso no cabe duda, pero antes se requiere aprobar reformas urgentes, como eliminar la no reelección congresal. Por más complicado que pueda tornarse todo, al final venceremos. Ya antes hemos derrotado al terror.