«Creo que la CONAR debe darle participación a los árbitros que han mostrado experiencia y habilidad suficiente para dirigir los partidos», afirma el titular de la FPF.
Existe un rasgo común en todos aquellos que forman organizaciones criminales: creen que la impunidad es perpetua y que se puede estar siempre al margen de la ley. Es el gran equívoco que los conduce a su caída. Suele tardar la ley, pero al final llega.