Zaira Arias entra en desesperación: de promover el cierre del Congreso a implorar por un escaño que no puede ocupar
Protagonizó una tensa escena en las puertas del Parlamento.
La exdirigente de izquierda Zaira Arias, quien intenta asumir el escaño de Guillermo Bermejo, protagonizó este lunes un episodio de visible desesperación a las puertas del Congreso de la República, tras ser impedida de ingresar por el personal de seguridad. Con documentos en mano, exigía ser acreditada como parlamentaria en reemplazo de Bermejo, actualmente involucrado en un proceso judicial por presuntos vínculos con el terrorismo.
Arias, quien en su momento promovió el cierre del Congreso durante las protestas de 2022, ahora implora por un lugar dentro del mismo hemiciclo. “Inaceptable. Hoy fui al Congreso para presentar mi acreditación como congresista accesitaria y me negaron el ingreso, incluso con el respaldo de una congresista en funciones. Una ilegalidad más de un Parlamento que teme al pueblo. ¡La voluntad popular se respeta!”, escribió indignada en sus redes sociales.
Ante la prensa, Arias denunció que se le está vulnerando su derecho a la representación popular y el principio democrático. “Soy congresista accesitaria legítima por Guillermo Bermejo, se están violando leyes y derechos. Estoy exigiendo mi incorporación inmediata como congresista de la República, pero estos señores no lo quieren hacer”, declaró en tono exaltado.
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Con papeles dirigidos al presidente del Parlamento, Fernando Rospigliosi, Arias exigió una respuesta inmediata y aseguró que, mientras no exista una sentencia firme contra Guillermo Bermejo, debería ocupar su escaño de manera temporal. “Aquí no estamos hablando de una sentencia condenatoria firme. Mientras no exista, entra y reemplaza el accesitario”, insistió ante los medios.
La exdirigente no se contuvo al expresar su frustración: “Vengo a desratizar el Congreso”, remarcó, haciendo eco de su retórica confrontacional. Sin embargo, su exigencia no prosperó y el personal de seguridad mantuvo las puertas cerradas ante su intento de ingreso.
El caso de Guillermo Bermejo continúa en el centro de la controversia. El congresista fue condenado a 15 años de cárcel por el delito de afiliación o pertenencia a organización terrorista. Ante esta situación, la curul no puede ser asumida por su accesitario, según las normas del Reglamento del Congreso.
Este vacío legal mantiene en el limbo a Zaira Arias, quien pasó en cuestión de meses de cuestionar al Parlamento a exigir formar parte de él. Su súplica, cargada de tensión política y desesperación personal, refleja el desconcierto dentro de las filas de izquierda tras el incierto futuro judicial de Bermejo y la imposibilidad de Arias de ocupar el escaño que considera suyo por derecho.
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