Violentistas impunes y miembros del Partido Morado usan fachada
Orquestadores de manifestaciones contra Merino donde murieron dos jóvenes, vuelven a la carga para tomar el poder.
“¡Si matan, se jo… Merino!” había sido el grito de guerra de Andrés “Anka” Huamaní para que jóvenes impulsados por la indignación política lanzaran piedras a policías. El Partido Morado fue el gran beneficiado con esto, ya que su militante Francisco Sagasti asumió el poder luego de las trágicas muertes de dos manifestantes. Esto sucedió en noviembre de 2020, y ahora intentan repetirlo de otra manera.
Huamaní estuvo hace tres semanas en el Congreso, donde su actitud azuzadora dio paso a pedidos de que le dejaran quedarse en silencio. Gracias a la fiscal Marcelita Gutiérrez, quien no investigó por hacerlo con altos mandos policiales y Manuel Merino, sigue dando discursos políticos radicales en la Plaza San Martín.
Con otro estilo se da el caso de “La Propuesta”, una iniciativa supuestamente independiente para juntar 250 mil firmas y pedir «que se vayan todos». Su vocera, Natalia Rodríguez, obtuvo alrededor de 100 mil soles como proveedora de la Municipalidad de Lima en la gestión de Jorge Muñoz, a quien no le funcionaron las cámaras de videovigilancia en los lugares donde sujetos no identificados mataron a Jordan Inti Sotelo y a Jack Bryan Pintado, disparándoles perdigones de plomo.
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Tras ella aparecen los miembros del Partido Morado Rodolfo Pérez (secretario general) y Flor Borja. Esto desmiente que sean un grupo espontáneo, como pretenden presentarse.
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